RITA MAGAÑA TORRES
La presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte, Marcela Guerra, pidió a presidentes de congresos de Centroamérica exploren la posibilidad de dotar a sus consulados, a través de leyes pertinentes, de recursos para atender a los menores migrantes no acompañados.
La petición de la senadora del PRI fue a Honduras, El Salvador y Guatemala, al mencionar que en México, desde 2002 se tiene una reforma a la Ley del Servicio Exterior Mexicano, a fin de que ingresos por servicios de expedición de pasaportes, documentos de identidad, viaje y derechos por prestación de servicios consulares, se destinen un fondo.
Dicho fondo tiene la finalidad de cubrir, previa autorización de la Secretaría de Relaciones Exteriores, los gastos relativos a las actividades y programas de repatriación de personas vulnerables.
Se busca que esos recursos se destinen a la atención y asesoría jurídica; visitas a cárceles y centros de detención; atención telefónica; campaña de seguridad al migrante; servicios de consulados móviles; prestación de servicios consulares en general y atención al público.
Guerra Castillo destacó la situación de vulnerabilidad a la que están expuestos los menores migrantes no acompañados, la cual ha movilizado a una gran cantidad de actores políticos de los principales países involucrados: Estado Unidos, Honduras, Guatemala, El Salvador y México.
Señaló que el Congreso mexicano está al tanto del problema, por lo que a través de foros y seminarios se intercambian experiencias, análisis, propuestas, iniciativas y prácticas para hacer frente a lo que se ha denominado como una crisis humanitaria del siglo XXI en América.
Como resultado de las comparaciones entre México y Centroamérica, en especial en materia de asistencia consular ante la problemática de los menores migrantes no acompañados, salta a la vista el gran potencial que despliega nuestra red consular, especialmente en Estados Unidos.
Por ello, en un acto de diplomacia parlamentaria, hizo un llamado a los legisladores de esos países centroamericanos para afrontar la realidad cotidiana que todo cónsul en funciones experimenta.
“Con el ánimo de poner sobre la mesa de nuestros pares en Centroamérica, propuestas concretas en las que el Poder Legislativo demuestra su compromiso ante esta situación”, destacó.