AGENCIAS
Tras los festejos anoche y hoy en Denver para celebrar el anuncio presidencial de las nuevas medidas inmigratorias, varias organizaciones comunitarias de Colorado comenzaron esta tarde a implementar programas para ayudar a las familias que podrían beneficiarse con las nuevas reglas.
«Obama tuvo la valentía de mantenerse firme y de hacer lo correcto. En nuestras comunidades creemos en la humanidad y en la democracia y somos parte de la democracia. Por eso, ayudaremos a las familias, no porque sean inmigrantes, sino porque son familias», declaró Nita Gonzales, directora de la Escuela Tlatelolco en Denver y dirigente del Foro Latino Colorado.
Gonzales encabezó hoy en Denver un encuentro de unas 50 personas, representantes de las organizaciones asociadas con la Coalición de Colorado por los Derechos de los Inmigrantes (CIRC).
«Ha sido una victoria histórica que permitirá que millones de familias y de trabajadores inmigrantes vivan, trabajen y se queden en este país, que ha sido su hogar desde hace muchos años», indicó Gonzales,
También puntualizó que «la acción ejecutiva no es un sustituto de nuevas leyes inmigratorias», pero las nuevas reglas, dijo, «cambiarán la vida diaria de muchas personas».
Una de esas personas es Ana Temu Vidrio, nacida en Estados Unidos, pero con miembros de su familia que carecen de presencia legal en el país.
«Me alegra que, gracias al anuncio presidencial, mi padre ya no tenga que vivir cada día con miedo a ser deportado», dijo la joven estudiante en la Universidad Estatal Metropolitana de Denver.
Se estima que hasta 64.000 personas de Colorado podrían llegar a beneficiarse con los cambios inmigratorios anunciados por el presidente Obama.
CIRC trabajará para informar a esos inmigrantes sobre los detalles de la implementación de las nuevas normas y para prevenir abusos o fraudes por parte de falsos notarios o gestores.
A pesar de tratarse de reuniones comunitarias, no faltaron los comentarios políticos. Casi unánimemente, los dirigentes se sintieron «muy insatisfechos» con la actitud adoptada por el Partido Republicano a nivel nacional, afirmando que «los republicanos sólo creen que están a cargo» y que «nosotros no nos vamos a ir a ningún lugar ni en ningún momento».
Esas observaciones resaltaron el hecho que, según encuestas realizadas tras las elecciones del pasado 4 de noviembre, el 73 por ciento de los votantes hispanos de Colorado se inclinó por candidatos demócratas.
Por su parte, el reverendo Mike Moran, pastor de la Primera Sociedad Unitaria de Denver (donde un inmigrante mexicano tiene «santuario» desde hace exactamente un mes), optó por un tono más conciliador.
«En este bendecido día se nos llama a trabajar juntos para el mejoramiento de todos. El futuro del país está ligado al destino de millones de inmigrantes», aseveró Moran.
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