El Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha revelado datos preocupantes sobre la violencia en el noviazgo entre los jóvenes mexicanos. Según el CIEG, tres de cada diez jóvenes en México reportan sufrir violencia en el noviazgo, y la forma más común es la violencia psicológica.
- Alma Patricia Piñones, secretaria de proyectos estratégicos del CIEG, ha enfatizado que estas agresiones constituyen una «urgencia social» y deben ser abordadas desde la perspectiva de género. Piñones subrayó que estas conductas están arraigadas en la jerarquía, dominación, poder y control, lo que hace necesario un enfoque integral para combatir este problema.
- Piñones destacó que es esencial abordar esta problemática, ya que, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), siete de cada diez mujeres mayores de 15 años en México afirman haber sufrido vulneraciones físicas o sexuales por parte de sus parejas. Sin embargo, solo el 13,6 % buscó ayuda en instituciones o autoridades.
- La experta advirtió que la violencia en el noviazgo afecta a todos los niveles socioeconómicos, ya que es normalizada y no reconocida por los menores de edad como una relación violenta. «Si les preguntas si su pareja es violenta, te dicen que no, solo es un poquito gritón o un poquito celosa, que los cela porque los quiere», puntualizó Piñones.
Piñones señaló que esta problemática puede derivar en consecuencias a largo plazo, como baja autoestima, deserción escolar, trastornos de la alimentación, agresiones físicas, violaciones recurrentes, infecciones de transmisión sexual, inestabilidad emocional, embarazos precoces y consumo de sustancias adictivas.
La Encuesta Nacional sobre Violencia en el Noviazgo (ENVIN) respalda estas preocupaciones, revelando que el 76 % de quienes sufrieron violencia en una relación experimentaron violencia psicológica, el 17 % sexual y el 15 % física.
- A pesar de la gravedad de la situación, muchos jóvenes no hablan de esta problemática debido al miedo o la falta de alguien en quien confiar. Piñones destacó que esto deja «marcas en el alma y el cuerpo», ya que las parejas suelen aislar a las víctimas para ocultar estas situaciones.
- La experta subrayó la dificultad que enfrentan los jóvenes para expresar su rechazo a la violencia en el noviazgo y planteó la pregunta: «Si a los adultos nos cuesta expresarlo, ¿cuánto le costará a los jóvenes?».
En este sentido, hizo un llamado a la sociedad para quebrar el silencio, fomentar el diálogo y ofrecer un entorno seguro donde los jóvenes puedan buscar ayuda sin miedo ni estigma, rompiendo así el ciclo de la violencia en las relaciones de pareja./Agencias-PUNTOporPUNTO