El gobierno del presidente Donald Trump opera un plan para usar la información familiar de niñas y niños encerrados en sus centros de detención migrante como pista de rastreo a parientes que ya vivan en Estados Unidos de manera ilegal y sean objeto de deportación.
Así lo admitió la administración, ayer, después de que el fin de semana, el Washington Post delatara un programa secreto en el que funcionarios del Departamento de Salud y Servicios Humanos permiten que agentes de la Patrulla Fronteriza recopilen huellas digitales e información biométrica de adultos que reclaman a menores migrantes en los albergues del gobierno.
Si después de una rigurosa evaluación, las autoridades consideran que esos adultos no son elegibles para tomar la custodia de los niños, el Departamento de Asuntos Fronterizos y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) puede usar este factor para arrestarlos.
- La estrategia, enmarcada en la política para disuadir a inmigrantes de entrar a EU, es un desafío al Congreso, que dejó claro que no quería que el gobierno asustara a quienes se presenten como posibles tutores de menores bajo custodia ante una posible deportación. Pero, en el razonamiento de la administración Trump, los adultos a quienes se les niega la custodia de los niños pierden su condición de “patrocinadores potenciales” y califican para salir del país.
- El plan fue desarrollado por Stephen Miller, principal asesor de inmigración de Trump, quien durante mucho tiempo argumentó que los padres que contratan contrabandistas para que lleven a sus hijos a EU utiliza las facilidades que presta la Oficina de Reasentamiento de Refugiados, pues la agencia trata de identificar patrocinadores, generalmente miembros de la familia, elegibles para tomar la custodia de los menores.
Funcionarios del gobierno admitieron que el plan infundirá miedo entre padres migrantes, pero aseguran que es un remedio para disuadir a familias de que sus hijos crucen ilegalmente.
Después de que la administración Trump comenzó una iniciativa similar de intercambio de información el año pasado, que previsiblemente llevó a menos patrocinadores a presentarse y creó una acumulación masiva de niños bajo custodia, los demócratas lucharon para poner un límite. El proyecto de ley de presupuesto de 2019 prohibió específicamente que el Departamento de Seguridad Nacional use los datos del patrocinador infantil (direcciones, nombres, números de teléfono) para generar listas de objetivos del ICE.
- De acuerdo con esas disposiciones, el secretario de Seguridad Nacional no puede utilizar fondos federales para iniciar procedimientos de deportación contra un tutor o posible patrocinador de un niño extranjero no acompañado.
- Personal de la Patrulla Fronteriza dijo que los candidatos a tutores con antecedentes penales son su prioridad para este plan de gobierno, que antepone la seguridad nacional.
- La administración Trump ha implementado medidas disuasorias que hacen que sea mucho más difícil para los migrantes calificar para protecciones de asilo. Desde principios de año, EU ha enviado a más de 53 mil migrantes de regreso a México para esperar aquí mientras se procesan sus solicitudes.
El gobierno también comenzó a enviar a solicitantes a Guatemala bajo los términos de un acuerdo que permitirá canalizarlos a la misma región de la que escapan, por la criminalidad.
Pero esas medidas no pueden usarse para rechazar a menores que buscan protección, por lo que Trump lucha para reformar lo que ve como un “vacío legal” que facilita la entrada de más indocumentados al territorio estadounidense./LA RAZÓN-PUNTOporPUNTO
Recibe nuestro boletín informativo, suscríbete usando el formulario
