La esperanza que albergaban los pobladores originarios en la actual administración se desvanece cada vez más ante el incumplimiento de los compromisos establecidos y la imposición de proyectos de infraestructura a través de consultas poco confiables, situaciones que han despertado los reclamos y protestas de este grupo vulnerable
La luna de miel se acaba. La esperanza de los integrantes de las comunidades originarias en México, de que con la llegada de la Cuarta Transformación al poder la difícil situación por la que atraviesan en materia de derechos humanos y de abandono por parte de las autoridades de los tres niveles de gobierno se solucionaría, hoy está menguando.
- La falta de acciones concretas para su beneficio, el sinfín de promesas incumplidas a lo largo de los años por parte de los distintos gobiernos en turno y la invasión de sus tierras para la construcción de proyectos de infraestructura de todo tipo, son los principales motivos por los cuales las comunidades indígenas del país han decidido plantarse como un sector de oposición cada vez más fuerte y decidido a ser escuchado y tomado en cuenta.
- Las protestas y exigencias por parte de las comunidades originarias se intensificarán a menos que se comiencen a ver resultados reales en relación a los compromisos que el Jefe del Ejecutivo adquirió con ellos
- “Somos un pueblo que vive en la pobreza, sumido en las enfermedades, la migración, la discriminación y la violencia. El gobierno no apoya nuestras actividades productivas y hay cacicazgos que no atienden la salud y educación de calidad”, denunció Emir Hernández Cortés, representante del pueblo Náhuatl, en el marco del diálogo del presidente López Obrador con comunidades Náhuatl, Otomí, Tepehua y Huasteca en Veracruz que llevó a cabo el jefe del Ejecutivo en los primeros días del año.
Por su parte, Juan Carlos Flores, abogado defensor del Frente de Pueblos Indígenas e integrante del Comité Nacional Indígena (CNI), asegura en entrevista para Reporte Indigo que conforme avance el sexenio del tabasqueño las protestas y exigencias por parte de las comunidades originarias se intensificarán a menos que se comiencen a ver resultados reales en relación a los compromisos que el primer mandatario adquirió con ellos antes de hacerse con el cargo más importante del país y ya una vez en posesión del mismo.
Una de las muestras más claras de esta realidad fue el anunció que realizó el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) a través de un comunicado en el cual informó que llevará a acabo una serie de jornadas de protesta en contra de los megaproyectos que busca edificar el Gobierno federal como el Tren Maya, el Corredor Transístmico Salina Cruz-Coatzacoalcos o el Proyecto Integral Morelos.
La construcción del Tren Maya es uno de los megaproyectos que desató la inconformidad del Ejército Zapatista de Liberación Nacional contra el gobierno
En el documento se hizo un llamado a organizaciones, comunidades, pueblos y colectivos para que se unan a las marchas en memoria del activista asesinado Samir Flores Soberanes, quien se oponía a la Termoeléctrica de Huexca en Morelos./REPORTE INDIGO-PUNTOporPUNTO