En vez de avanzar, los niveles educativos en México retroceden, ocasionando que nos encontremos lejos de que la educación se convierta en un motor para el desarrollo, para combatir las desigualdades y darle una mejor vida en el futuro a nuestras infancias.
- La responsabilidad de este fracaso educativo es compartida entre autoridades de los tres niveles de gobierno, directivos e incluso docentes.
- Tras más de 20 años de aplicación en México del examen del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la Organización para la Cooperación y del Desarrollo Económica (OCDE), los alumnos del país retrocedieron al nivel educativo de 2003, es decir, casi desde que comenzó este examen.
Cada tres años, la OCDE aplica la prueba PISA con el objetivo de evaluar los conocimientos y habilidades intelectuales adquiridas por los adolescentes quienes continúan en la escuela y cuentan con la edad normativa (15 años de edad), para concluir la educación básica.
- La responsabilidad de este fracaso educativo es compartida entre autoridades de los tres niveles de gobierno, directivos e incluso docentes.
- Tras más de 20 años de aplicación en México del examen del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la Organización para la Cooperación y del Desarrollo Económica (OCDE), los alumnos del país retrocedieron al nivel educativo de 2003, es decir, casi desde que comenzó este examen.
Cada tres años, la OCDE aplica la prueba PISA con el objetivo de evaluar los conocimientos y habilidades intelectuales adquiridas por los adolescentes quienes continúan en la escuela y cuentan con la edad normativa (15 años de edad), para concluir la educación básica.
Los resultados de la última prueba PISA demuestran que los estudiantes mexicanos presentan severas deficiencias en materias básicas.
Aunado a las deficiencias en los aprendizajes, el problema se agrava por los niños que no están inscritos en la escuela, los cuales son alrededor de medio millón de menores de edad.
“De manera consistente, los resultados de PISA indican deficiencias en los aprendizajes fundamentales de gran parte de los estudiantes mexicanos. Si a ello se suma que persiste un número importante de personas de 15 años no inscritas en la escuela —que hipotéticamente tienen altas probabilidades de carecer de los conocimientos y habilidades intelectuales que evalúa PISA— el porcentaje de jóvenes de 15 años con carencias severas en su educación se incrementa considerablemente”, señala un estudio sobre los resultados de la prueba elaborado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
Debido a esta situación, el estudio sobre PISA concluye que la hipótesis de que los jóvenes no han logrado desarrollar las habilidades intelectuales que evalúan las pruebas es acertada.
“Quienes se ubican en los niveles bajos de desempeño en PISA, conforman un extenso grupo de personas que —en mayor o menor medida— experimentarán dificultades para insertarse en su futura vida laboral y social”, agrega el estudio.
Peligra PISA de 2025
El próximo año se aplicará la prueba PISA para evaluar a los estudiantes de 15 años en lengua extranjera, aprendizaje en el mundo digital, conocimientos en cambio climático y medio ambiente, sin embargo, la OCDE reveló que nuestro país no ha cumplido con los requisitos para poder aplicar el examen, entre los que se encuentra la prueba piloto y pagar las cuotas para realizar la prueba.
“La participación de México en la próxima ronda PISA 2025 está actualmente en riesgo, ya que tengo entendido que los preparativos necesarios para implementar el estudio se han suspendido”, escribió Andreas Schleicher, director de Educación y Competencias de la OCDE, en una carta dirigida a la presidenta de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación, Silvia Valle Tépatl.
Debido a esta situación, la organización civil Educación con Rumbo (ECR) obtuvo un amparo del juez de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México, que obliga a la Secretaría de Educación Pública (SEP) y a la a Comisión Nacional para la Mejora Continua a realizar las gestiones y trámites ante la OCDE para garantizar que la evaluación de PISA se realice el próximo año para garantizar el derecho humano de la niñez a la educación.
Apenas hace una semana el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que “sin ningún problema” se aplicará la prueba.
“Todo lo que tenga que ver con la educación se apoya, he estado viendo eso, de que hablan de que no vamos a participar, pero sí, no sé en qué consiste”, dijo.
Las causas
El Centro de Estudios Espinosa Yglesias, asociación civil cuya misión es generar investigación especializada para conformar directrices de políticas públicas y acciones que impulsen la movilidad social en México, realizó un análisis de la educación en México, encontrando que el bajo nivel de la educación se debe a varios factores, entre ellos, la baja inversión en el rubro.
- El gasto por estudiante se ha reducido en los últimos años al 3 por ciento del Producto Interno Bruto, cuando lo recomendable, según organizaciones internacionales, es que abarque el 5 por ciento del PIB.
- De acuerdo con esta organización, aunque entre 2018 y 2023 se ha impulsado un cambio narrativo en torno a la educación, como el cambio radical en contenidos y métodos de enseñanza, esto podría constituir una medida tardía.
Aunado a ello, las debilidades en la formulación de los programas podrían poner en riesgo la adquisición de aprendizajes, al igual que la falta de diagnósticos y medidas para revertir el rezago educativo provocado por la larga ausencia en las aulas debido a la pandemia de COVID-19./Agencias-PUNTOporPUNTO