La Unión Nacional de Padres de Familia y otras asociaciones educativas exigieron a la Secretaría de Educación Pública (SEP) transparentar el contenido de los libros de texto gratuitos que rediseñó para primero de primaria.
- Tras difundirse que el nuevo libro de Español para este grado escolar «normaliza el uso incorrecto de algunas palabras» y «romantiza la pobreza», los representantes de las organizaciones urgieron a la dependencia a presentar el contenido de los cinco libros restantes.
“Exigimos a las autoridades de la Secretaría de Educación Pública, en un ejercicio de transparencia, informar de manera puntual el estado que guardan los demás libros y el por qué no se han convocado a las entidades y a los diversos actores a participar. Urge conocer los nuevos libros; los tienen en la opacidad”, mencionó Paulina Amozurrutia, directora de la organización Educación con Rumbo.
Demandan conocer nuevos contenidos
También exigieron a la SEP difundir el diagnóstico con el que avaló que se requería un nuevo plan de estudio para la educación básica y si efectivamente ya concluyó la edición de todos los libros del primer grado de primaria, explicar por qué no se sometieron a revisión de docentes, académicos y padres de familia y cuál fue el proceso pedagógico que siguieron.
“Queremos que dejen de jugar con la educación de nuestros niños, que la educación tenga un sustento real en lo que marca el artículo 3 de la Constitución: educación científica, gratuita y laica”, agregó.
- José Antonio Cabello Gil, de la organización Suma por la Educación, pidió a la SEP realizar una amplia consulta entre especialistas, académicos y padres de familia, para que puedan opinar sobre el diseño de los libros de texto. Además, solicitó a la autoridad educativa que parta de una noción de educación amplia y científica.
Además de los libros de primer grado de primaria, la SEP lleva a cabo el rediseño de libros de segundo y tercer grados de primaria; sin embargo, no se ha tenido acceso al contenido por la falta de transparencia de la dependencia, afirmó Francisco Landero, de Suma por la Educación.
«¿Quiénes únicamente los conocen? Las personas que los diseñaron y a las cuales se les obligó a firmar una carta de confidencialidad» sostuvo./Agencias-PUNTOporPUNTO