Tanto la renuncia de Eduardo Medina Mora a la SCJN como el proceso que siguió a ese acto, con la aceptación inmediata del Presidente y la convalidación del Senado, es un acto “inconstitucional” y una señal negativa de opacidad, debido a que la Carta Magna establece que los anuncios de este tipo deben estar fundados y motivados, lo cual nunca sucedió, afirmaron especialistas en temas de transparencia.
Javier Martín Reyes, profesor de la división de estudios jurídicos del Centro de Investigación y Docencia Económicas, subrayó que desde el punto de vista constitucional resulta “problemático” que se haya aceptado la renuncia de un ministro de la Corte sin explicar cuál fue la razón. Debía quedar acreditado si (Medina Mora) renunció por motivos de salud o porque estaba siendo investigado”, pero nada de eso ocurrió.
- Así, se puede afirmar que todo el proceso fue inconstitucional, aunque al mismo tiempo se trata de un hecho muy difícil de impugnar o de revertir, admitió el académico./ LA JORNADA