La oscuridad envuelve los recursos públicos recibidos por los sindicatos: desde 2018, ni la mitad de estos grupos cumple con la totalidad de sus obligaciones de transparencia. Además, una gran parte de ellos no alcanza ni el 75% en su rendición de cuentas.
- El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) es el ente facultado para revisar el porcentaje de opacidad en las dependencias públicas, lo cual realiza mediante el Índice Global de Cumplimiento en Portales de Transparencia (IGCPT).
Dicho indicador revela que en 2018 solo 22 de los 149 sindicatos registrados como sujetos obligados realizaron el 100% de lo mandatado por la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública. Para 2019 la cifra creció a 67, el número más alto del último lustro.
Los sindicatos con recursos del gobierno bajaron a 89 en 2020, de estos únicamente 26 obtuvieron 100% en su IGCPT. Un año después se mantuvo la cantidad de grupos sindicales y subió a 31 la de quienes sí llegaron al 100% en el índice del Inai. Mientras, en 2022 de los 88 con obligaciones de transparencia 33 tuvieron el porcentaje completo.
- El IGCPT les da cierta calificación a las dependencias públicas sobre el cumplimiento de la citada ley, lo cual sirve para hacernos una idea de cuán transparente es una institución o no, explicó a Publimetro la doctora Mariana Cendejas, investigadora de la Iniciativa de Transparencia y Anticorrupción del Tec de Monterrey.
- No obstante, abundó la especialista, no es vinculante a sanciones. Para ello, dijo, se necesita un proceso iniciado por el Inai a través de sus facultades de verificación o una denuncia por incumplimiento (cualquier persona puede interponerla).
“Ahí es la cueva del lobo. Es de todos conocido las corruptelas que se han dado históricamente en todos los sindicatos fuertes: el de Pemex, el de los trabajadores en materia eléctrica, el de los mineros… En fin, estos cómo se han enriquecido, y ahora sí que el amor y el dinero no se pueden esconder”, aseveró la académica.
Los sindicatos más opacos
El indicador del Inai también desvela que 62 sindicatos en 2018 no alcanzaron ni el 75% en su reporte de obligaciones de transparencia; en 2019 fueron 52. Para 2020 y 2021 se tuvieron 24 y 29, respectivamente. En 2022 aparecieron en la misma situación 24 grupos sindicales.
- Incluso, año con año, se matriculan asociaciones de este tipo con 0% en su Índice Global de Cumplimiento en Portales de Transparencia. Los años con la cifra más elevada son 2018 –20– y 2019 –22–, los de la menor 2020 –13– y 2021 –17.
- La opacidad es consecuencia de las débiles sanciones del Inai, consideró Mariana Cendejas, porque a los sujetos obligados no les cuesta nada acatarlas. Por ejemplo, agregó, tras un largo proceso de citas, considerandos, notificaciones, etcétera, la resolución del caso de un presunto infractor del sindicato de la Universidad Autónoma Metropolitana fue tan solo un apercibimiento.
“¿Por qué sucede esto? Porque reina la opacidad ahí y quieren seguir manejándose abajo de la mesa con toda la libertad para seguir haciendo este tipo de actos ilícitos. Los sindicatos son reacios a transparentar su información”, aseveró la investigadora del Tec de Monterrey.
Entre los grupos con 0% en su IGCPT destacan el Sindicato de Trabajadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, el de Petroleros de la República Mexicana, el de la Secretaría de Energía, el del Poder Judicial de la Federación, el independiente de la Cámara de Senadores (sic), el de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el del Fondo de Cultura Económica y el del Servicio de Administración Tributaria y de Hacienda.
Tienen mala imagen
Históricamente, ha persistido la idea sobre que los sindicatos se resisten a abrir la información y la rendición de cuentas, lo cual fortaleció una visión de opacidad en su actuar y señalamientos poco favorables respecto a su existencia, indicó en entrevista Fabiola Osorio, colaboradora de la organización Transparencia Mexicana.
- Sin embargo, continuó la experta, transparentar su actuar ya no es suficiente: se necesita democratizar las estructuras sindicales de modo que se propicie no solo la rendición de cuentas, sino también acciones judiciales contra dirigencias corruptas.
- Los bajos porcentajes obtenidos por dichos grupos en el índice del Inai influye en su credibilidad y legitimidad, apuntó Fabiola Osorio, además refuerza la mala percepción de la opinión pública hacia ellos. La apertura, dijo, debe fortalecer sus procesos internos y su confiabilidad a partir de la limitación de las especulaciones en torno a las decisiones de los líderes.
No todos los sindicatos están obligados a cumplir con la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública, abundó la especialista, únicamente aquellos que reciben recursos del gobierno. El resto, subrayó, depende de la voluntad de sus dirigencias y de la exigencia de los trabajadores./Agencias-PUNTOporPUNTO