Los miembros de la ONU deberían poner fin a los lineamientos punitivos frente al control de drogas y replantear los objetivos generales de la política en la materia, anteponiendo a los ciudadanos, concluye el reporte «Balance de una década de políticas de drogas-Informe sombra de la sociedad civil».
El documento, elaborado por el Consorcio Internacional sobre Políticas de Drogas (IDPC), advierte que durante los últimos 10 años el objetivo de erradicar los mercados ilegales no ha dado resultado, por lo que insta a los Estados a repensar la estrategia para la próxima década.
- «Las políticas de drogas excesivamente punitivas, en lugar de reducir la escala global del mercado ilícito, en muchas ocasiones han exacerbado la violencia, la inestabilidad y la corrupción», sentencia el diagnóstico.
- «Se han asociado (esas políticas) con un amplio abanico de violaciones de los derechos humanos y amenazas a la salud y el orden públicos. Estos abusos han tenido consecuencias graves en las vidas de personas y comunidades marginadas de todo el mundo».
- Tan sólo en México, advierte, la «guerra militarizada» declarada en 2006 contra los cárteles derivó en más de 150 mil muertes asociadas con el comercio de drogas y en más de 32 mil desapariciones.
- El IDPC evaluó las repercusiones de las políticas de drogas aplicadas en todo el mundo en los últimos 10 años, usando datos de la ONU y complementándolos con estudios de la sociedad civil.
En el documento se advierte que los objetivos y compromisos asumidos en el denominado Plan de Acción de 2009, que la ONU adoptó ese año para luchar contra el problema mundial de las drogas no se han alcanzado y, en muchos casos, han terminado en políticas contraproducentes.
- Por ejemplo, cita, entre 2009 y 2018 no se redujo la escala global de cultivo de opio, cocaína y cannabis. Por el contrario, durante este período el cultivo aumentó 130 por ciento en el caso de la adormidera y 34 por ciento en el del arbusto de coca.
- En lo que respecta a la cannabis, el documento señala que si bien no se dispone de estimaciones globales recientes, la ONU documentó que entre 2010 y 2016 se notificó el cultivo de la planta en 145 países, sin que se insinúen indicios de reducción.
- Se calcula que unos 275 millones de personas en todo el mundo, de entre 15 y 64 años, consumieron drogas en al menos una ocasión en 2016, cifra que representa un aumento de 31 por ciento con respecto a 2011.
«El Informe sombra demuestra que el objetivo de lograr un mundo sin drogas es poco realista e inalcanzable. La búsqueda de los objetivos del mundo sin drogas ha dado lugar a políticas y prácticas de aplicación de la ley punitivas que han menoscabado la salud, los derechos humanos, el desarrollo y la seguridad», sostiene./REFORMA