El incendio que quema desde el jueves en el norte de California y que ha causado la muerte de por lo menos 23 personas, ya es considerado el más destructivo de la historia del estado, tras haber quemado 40 mil 460 hectáreas, arrasado más de 6 mil 500 edificios y engullido la práctica totalidad de la ciudad de Paradise. La cifra de fallecidos aumentó de 5 a 23 ayer luego de que las autoridades descubrieran en la mañana a tres personas que perdieron la vida cerca de sus casas y otro en el interior de una vivienda. En la tarde aparecieron otros 14 cuerpos calcinados en Butte County, según explicó el sheriff Kory Honea. Debido a los fuertes vientos que soplan en la zona, a la sequedad del terreno, las llamas avanzan con rapidez, y los bomberos sólo han podido contener, por el momento, el 20% del incendio./ LA CRÓNICA DE HOY
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