Al escritorio del director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto, todavía no llega el proyecto del Tren Maya, anunciado por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador. El tren pasará por Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, conectando así los principales centros arqueológicos de la cultura maya de nuestro país.
- El único funcionario de la Secretaría de Cultura que ha sido ratificado en su cargo para continuar en la administración de AMLO dijo que todavía no conoce “formalmente” esta iniciativa que pretende impulsar el turismo en el sur del país.
- En conferencia de prensa, a pregunta expresa de MILENIO, el funcionario respondió: “¡No, pero lo conoceremos! Siempre que se plantea un proyecto tiene que entrar el INAH. Claro que realizaremos todo el acompañamiento necesario a la construcción del Tren Maya: veremos por dónde pasará, porque en ciertos tramos ya existe un derecho de vía.
- Es decir, veremos en todo caso, que el trazo se corresponda con áreas que no afecten al patrimonio arqueológico, por el contrario, que nos permitan investigarlo, estudiarlo, recuperarlo, salvarlo”, indicó el director de la institución durante la inauguración del simposio “El Códice Maya de México”, en el Museo Nacional de Antropología.
- Prieto señaló que el INAH estará pendiente de la construcción del Tren Maya. Aseveró que, “haciendo las cosas con cuidado, es perfectamente compatible el progreso, el desarrollo y el desenvolvimiento de las actividades económicas con el cuidado de nuestra memoria y nuestra tradición y nuestros patrimonios arqueológicos e históricos, antropológicos y paleontológicos”.
En caso de que se encuentren vestigios arqueológicos, en particular de una ciudad prehispánica, tendrán entonces que hacer alguna modificación de trazo. “Tenemos tecnologías muy avanzadas que nos ayudarán a tener claro qué es lo que podríamos encontrar, para saber si hay estructuras en el subsuelo, de manera que lo haremos con toda la celeridad del caso, pero siempre, con el cuidado y la sistematización del trabajo arqueológico”, indicó el antropólogo.
El funcionario señaló que se tomará en cuenta la información del Atlas de ubicación de vestigios arqueológicos , “donde el INAH tiene identificados más de 60 mil puntos en la geografía nacional. En la zona maya hay miles de sitios de diferente carácter y eso no significa que no se pueda hacer nada; el país sigue su marcha”.
- Para Prieto, el proyecto puede detonar muchas cosas en distintos planos. “Toda actividad que contribuya al desarrollo de nuestro país, al mejoramiento de sus comunidades y a la detonación de cuestiones que fortalezcan el crecimiento de nuestra economía, es bienvenida, siempre en el marco de nuestra normatividad”.
- Adelantó que se reunirá con los delegados del INAH de los cinc o estados por donde pasará el Tren Maya. “Nos reuniremos con los arqueólogos que van a ocuparse de revisar este proyecto y con el grupo que está al frente de esta iniciativa. He tenido pláticas con ellos pero no tengo el conocimiento preciso, ni se me ha hecho llegar el proyecto. Supongo que es cosa de días; no nos desesperemos, estamos en una transición”.
- De acuerdo con investigadores del INAH, el Códice Maya de México, antes conocido como el Códice Grolier, que data del postclásico temprano, del año mil de nuestra era, es el manuscrito americano legible más antiguo conocido hasta ahora.
Sofía Martínez del Campo y Baltazar Brito conformaron un equipo multidisciplinario, integrado por historiadores, arqueólogos, antropólogos físicos, conservadores, arqueobotánicos, biólogos, epigrafistas, físicos, geólogos y entomólogos forenses para llevar a cabo esta tarea. Dicho códice es un calendario adivinatorio cuya temática se refiere a cuestiones rituales, que tiene que ver con sus dioses y ceremonias, profecías y cálculos astronómicos./ CON INFORMACIÓN DE MILENIO