Durante este jueves, las autoridades japonesas aseguraron que sacrificarán a 330,000 pollos en una granja de cría situada en Mitoyo -oeste del país-, tras detectar un brote de gripe aviaria, un virus altamente patógeno que principalmente afecta a las aves, pero se cree que ciertas cepas son capaces de transmitirse a otros animales y al ser humano.
El gobierno japonés informó a través de su ministerio de Agricultura que ha tomado todas las medidas necesarias para “impedir que se extienda la infección”. Es el primer brote de gripe aviar que se registra en el país en los últimos dos años y diez meses.
Por su parte, en Europa, en los Países Bajos, el ministerio de Agricultura neerlandés anunció que más de 35.000 pollos serán ejecutados luego de haber descubierto un nuevo brote de gripe aviar en una granja de Altforst, a 100 kilómetros de la capital Ámsterdam, donde se encuentran otras 34 granjas en un radio de 10 kilómetros.
- En el norte de Alemania se ha encontrado también un nuevo brote de gripe aviar en una granja avícola en el estado de Schleswig-Holstein. El ministerio de Agricultura de ese estado federado anunció este jueves que el virus ya se ha propagado en otras aves silvestres y que las aves ya infectadas han sido sacrificadas profesionalmente. En tanto, en Gran Bretaña, se ordenó el lunes sacrificar cerca de 13.000 aves en una granja de Frodsham, a raíz de la presencia del mismo virus.
- Las autoridades de Francia también pusieron a ciertas zonas del país en alerta máxima por el aumento de los casos en países vecinos. Alrededor de la mitad de los departamentos administrativos de Francia serán clasificados como de alto riesgo, mientras que el resto del país estará en alerta media, dijo el gobierno en un decreto publicado en su boletín oficial.
“La presencia del virus en animales salvajes cerca de las fronteras de Francia, en un canal migratorio que atraviesa el territorio nacional, justifica el aumento del nivel de riesgo”, dijo el gobierno francés en el decreto.
Si bien no se trata del mismo tipo de animales, Dinamarca ya había anunciado el miércoles que sacrificaría entre 15 y 17 millones de visones por miedo a la propagación de una mutación del coronavirus detectada en este tipo de animales, que había sido transmitida a 12 personas.
Extraña, pero grave
Desde la institución explican que el riesgo de transmisión de la enfermedad de aves a seres humanos es “muy bajo”, pero se recomienda a la población no tocar aves muertas sin llevar un equipo de protección adecuado que permita minimizar los riesgos. Y es que, a pesar de ser extraño que nos contagiemos, de hacerlo, podemos correr mucho riesgo. Esta variedad de la gripe aviar es mucho más grave que la que sufrimos hace casi diez años. “Aproximadamente, el 60% de los casos que se han dado en humanos han acabado con el fallecimiento del paciente”, advierten desde el CDC.
Por todo ello, en el informe se aconseja a los países europeos tomar medidas para detectar rápidamente los casos sospechosos de HPAI, aumentar la bioseguridad en las granjas avícolas y avisar a las autoridades veterinarias y sanitarias responsables de la fauna silvestre sobre el probable riesgo de aparición de la IAAP, así como instarlas a que observen y analicen con celeridad las aves silvestres muertas o enfermas.
Algunos síntomas se asemejan a los de la COVID-19
Con ocurre con la COVID-19, el virus de la gripe aviar afecta al sistema respiratorio y provoca una enfermedad severa, normalmente neumonía y fallo respiratorio, lo que puede resultar mortal. Sin embargo, existe una gran diferencia entre ambos virus, según los especialistas del CDC: “La mayor parte de las infecciones que se dan de HPAI H5N1 han tenido lugar en niños y en adultos menores de 40 años. La mortalidad es mayor entre los individuos con una edad comprendida entre los 10 y los 19 años, así como en los adultos jóvenes”.
- Por su parte, la mayoría de los casos se ha producido por el contacto físico directo con un ave muerta o enferma infectada por el virus. No obstante, intervienen otros factores de riesgo, como visitar un mercado avícola o estar en contacto directo y prolongado con pacientes de HPAI H5N1, destacan desde la institución.
Los virus de la gripe aviar pueden adaptarse para propagarse entre mamíferos
En 2014, un virus de gripe aviar causó un brote en las focas portuarias y grises del norte de Europa, matando a más del 10% de la población. En un estudio que publica la revista ‘Cell Host & Microbe’, los investigadores señalan las mutaciones de adaptación de los
mamíferos que aparecieron durante el brote.
Muestran que estas mutaciones también hicieron que el virus se transmitiera por el aire en los hurones y que mutaciones similares juegan un papel recurrente y consistente en hacer que los virus de la gripe aviar sean más transmisibles entre otras especies de mamíferos.
«Por lo general, estas introducciones ocasionales de virus de gripe aviar en focas, como en humanos, son ‘callejones sin salida’ porque el virus no se puede transmitir de un individuo a otro –explica el primer autor Sander Herfst, profesor asistente de Virología Molecular y Evolución del Virus en el centro médico universitario Erasmus MC, en Países Bajos–. Sin embargo, a veces estos virus se adaptan al nuevo antrión y adquieren la capacidad de transmitirse entre individuos».
La cepa del virus de la gripe aviar responsable del brote, del subtipo H10N7, causó por primera vez infecciones virales en puertos y focas grises a lo largo de la costa del oeste de Suecia y el este de Dinamarca en la primavera de 2014, matando a más de 500 personas.
Desde allí, se extendió hacia el sur hacia las costas del oeste de Dinamarca y Alemania, y finalmente los Países Bajos, lo que provocó la muerte de unas 2.000 focas adicionales. Los investigadores creen que el brote inicial probablemente fue causado por una foca que entró en contacto con aves o sus excrementos, pero se desconoce cómo pasó entre las focas.
- «Es probable que la transmisión de una foca a otra se haya producido a través de aerosoles o gotitas respiratorias, muy probablemente mientras las focas están descansando en la tierra. Sin embargo, la transmisión por contacto directo entre focas tampoco puede excluirse porque las focas son muy sociales e interactúan entre sí con regularidad», dice Herfst.
Por lo tanto, el brote de focas brindó a los investigadores la oportunidad de estudiar cómo los virus de la gripe A, que son conocidos por su alta transmisión entre especies, pueden saltar entre especies de mamíferos.
- Herfst y sus colegas recogieron variantes adaptadas a las aves y a las focas del virus que causó el brote de 2014 y midieron su transmisibilidad entre hurones, que son organismos modelo útiles para esta investigación porque los virus que se propagan a través del aire entre hurones probablemente también sean transmisibles entre humanos y otros mamíferos.
«Descubrimos que el virus adaptado a las focas se transmitía de manera eficiente a través del aire a través de aerosoles o gotitas entre hurones, mientras que el virus aviar no –apunta Herfst–. Estos hallazgos sugieren que las mutaciones que sufrió el virus aviar
una vez que se apoderó de la población de focas le han permitido volverse transmisible a través del aire entre mamíferos».
- En sus investigaciones de las mutaciones en el virus de las focas y los fenotipos asociados que resultaron en una transmisión eficiente entre hurones, Herfst y su equipo encontraron mutaciones clave en el virus hemaglutinina, una proteína en la superficie de los virus de la influenza que juega un papel importante en la unión a células huésped.
Estos cambios, dicen, afectaron la estabilidad de la hemaglutinina y además llevaron a que el virus prefiriera unirse a los receptores del virus de los mamíferos en el tracto respiratorio, en lugar de a los aviares. Curiosamente, estas mutaciones de preferencia de hemaglutinina ocurrieron en virus aislados en las últimas fases del brote de focas, lo que sugiere que una mayor adaptación a un huésped mamífero ocurrió después de que el virus comenzó su propagación inicial.
No es la primera vez que se observan este tipo de mutaciones en los virus de la gripe. De hecho, han estado presentes en pandemias anteriores.
«Las mutaciones que hemos identificado son similares a las adquiridas en 1957 en el primer año de la pandemia de H2N2 en humanos. Además, esas mismas mutaciones fueron necesarias para hacer que los virus de la gripe aviar altamente patógena del subtipo H5N1 fueran transmisibles por vía aérea entre hurones, un organismo modelo para la investigación de la gripe en los mamíferos», señala Herfst.
No se han reportado casos de transmisión de focas a humanos, pero estos hallazgos muestran que existen mutaciones virales consistentes que permiten que la influenza aviar se vuelva transmisible entre mamíferos y que las focas tienen el potencial de convertirse en un nuevo reservorio del virus de la gripe aviar.
Más importante aún, estos resultados refuerzan la necesidad de un cribado proactivo para identificar mutantes virales que pueden volverse altamente contagiosos y cruzar el límite de la especie.
«Las pandemias de virus de la influenza anteriores; la aparición de los virus de la influenza H5N1 y H7N9 en humanos en 1997 y 2013, respectivamente; la pandemia actual de COVID; y también el brote del virus de la gripe H10N7 en focas demuestran claramente que comprender la transmisibilidad de los virus que circulan entre especies animales y comenzar a infectar a los humanos y otros huéspedes es fundamental», explica.
«Es importante monitorear y predecir cuáles de los diversos virus zoonóticos tienen el potencial de emerger en humanos y comenzar brotes o incluso pandemias –añade–. Sin este conocimiento, solo podemos aplicar un enfoque reactivo en lugar de preventivo para
limitar el impacto de infecciones por virus, como se hace actualmente para la pandemia de COVID»./Agencias-PUNTOporPUNTO