El Consejo de Salubridad General (CSG) determinó que ante la posible saturación de los servicios de medicina crítica durante la epidemia por Covid-19 en México se priorizará a los pacientes jóvenes sobre los adultos mayores o de aquellos que tengan una enfermedad crónica.
Según el CSG, la Guía bioética de asignación de recursos de medicina crítica sólo entrará en operación si la capacidad existente de cuidados críticos está sobrepasada o está cerca de serlo y no es posible referir a pacientes que necesitan terapia intensiva a otros servicios de salud.
En un primer punto, establece que asignar recursos escasos entre pacientes con condiciones similares se puede hacer al azar, pero cuando los enfermos tienen una diferencia de edad significativa la decisión puede ser modificada.
- “Cuando sólo tenemos un ventilador y hay dos pacientes; un paciente “A de 80 años y un paciente ‘B de 20 años. Supongamos que si el paciente “A’ recibe el ventilador vivirá siete años más y si el paciente B’ recibe el ventilador vivirá 65 años más”, establece. |
- Así, se aplica el principio de salvar la mayor cantidad de “vidas por completarse” que, según el documento publicado por el CSG, se refiere a aquella persona que aún no ha pasado por los diferentes estados de desarrollo bio-sicosocial huma nos como infancia, adolescencia, edad adulta y vejez.
- “Los pacientes que tienen mayor probabilidad de sobrevivir con la ayuda de la medicina crítica son priorizados sobre los pacientes que tienen menor probabilidad. La presencia de comorbilidades serias deberá ser tomada en cuenta cuando se calcule la prognosis a largo plazo de los pacientes”, indica.
Sobre la guía, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, afirmó que es importante ubicar todos los escenarios posibles, pero aún no implica una decisión.
“Lo que consideramos es que es muy importante ubicar los distintos escenarios en los que podemos estar en una situación tan compleja como ésta y no olvidar que los preceptos deben ser considerados como estándares universales. La guía es un documento que está a disposición del Consejo General de Salubridad, pero no implica una decisión ejecutiva”, dijo.
La guía enfatiza en que usar este principio puede parecer discrimina torio hacia los adultos mayores, pero descarta dicha idea.
“Para entender por qué se tendrán que remontar a la pregunta: ¿por qué la muerte es mala para nosotros? La respuesta es que la muerte es mala porque nos priva de oportunidades valiosas futuras. Por lo tanto, un sistema de asignación de recursos escasos que favorece salvar la mayor cantidad vidas por completarse es un sistema que prioriza a aquellos que por lo general perderían más si murieran”.
Se reitera que salvar la mayor cantidad de vidas requiere evaluar la posibilidad de que un paciente sobreviva y el tiempo se utilizarán los recursos escasos que se pueden reutilizar. “Por ejemplo, si dos pacientes requieren de ventilación y uno, dada una comorbilidad, se tardaría el doble de tiempo en recuperarse, entonces el ventilador se le asigna al que no tiene comorbilidad; así, el recurso escaso se puede utilizar de manera más pronta para salvar otra vida”, señala.
- El CSG estableció que, en caso de un empate y al usar el principio de vida por completarse, la decisión será al azar y se tomará en cuenta la tasa de mortalidad por Covid-19.
- Se resalta que en la asignación de recursos escasos de medicina crítica no deberán tomarse en cuenta la “filiación política, religión, ser cabeza de familia, valor social percibido, nacionalidad o estatus migratorio, género, raza, preferencia sexual, discapacidad” del paciente.
- En cuanto al personal médico contagiado y que requiera de recursos de medicina crítica escasos, se resolvió que la priorización a este sector debe ser absoluta, pero únicamente a los profesionales de la salud que hacen frente a la pandemia. La única excepción será cuando presenten comorbilidades o su pronóstico sea tan grave que los recursos escasos no harían ninguna diferencia en su salud.
- “El personal de salud tiene un valor instrumental mayor durante la emergencia médica. Es importante notar que no se le debe dar prioridad a todo el personal de salud, sino únicamente al que se enfrenta a la emergencia de Covid-19. Por ejemplo, un dermatólogo no debe recibir atención prioritaria, pero un profesional de enfermería sí”, indica.
La guía, que fue redactada por los investigadores y miembros del comité de ética del Consejo de Salubridad General María de Jesús Me dina Arellano y César Palacios González, indica que en ésta no se excluye a ningún paciente de recibir cuidados críticos.
“La edad biológica o tener una discapacidad no son de por sí características que excluyan a pacientes de recibir cuidados críticos. Es un error que ha de evitarse a toda costa el de asumir que tener cualquier discapacidad es sinónimo de tener una prognosis médica desfavorecedora”, advierte.
El documento señala que cada unidad de salud donde se brinde atención de medicina crítica deberá conformar equipos de triage, que se encargarán de asignar los recursos escasos. Se conformarán por un médico intensivista o urgenciólogo, por un profesional de enfermería intensivista o de urgencias médicas y un administrador del centro de salud.
Para retirar al paciente de cuidados críticos será necesario que el equipo de triage informe al paciente y a sus familiares, quienes tendrán la oportunidad de apelar la decisión.
En caso de que un paciente no califique para recibir cuidados críticos debe seguir en tratamiento médico. “Mismo que debe incluir manejo de síntomas y soporte sicológico. Se deberá evaluar a los pacientes de manera constante para determinar si hay cambios en su estatus clínico y en la disponibilidad de cuidados críticos para que sean candidatos de ser admitidos en terapia intensiva”.
- La guía subraya que el tiempo que dure la emergencia el sistema de triage para decidir quién usa los cuidados de medicina crítica se tendrá que aplicar en pacientes de Covid-19 y en aquellos que requieren el servicio por otros padecimientos, “tener Covid-19 no hace que un paciente tenga mayor prioridad para acceder a los recursos escasos”.
- En Italia, el 13 de marzo, con más de 10 mil casos de Covid-19, el Colegio Italiano de Anestesia, Analgesia, Resucitación y Cuidados Intensivos publicó las Recomendaciones de ética clínica para la admisión a tratamientos intensivos y por su suspensión en condiciones excepcionales de desequilibrio entre necesidades y recursos disponibles, en el que establece que se deben maximizar los beneficios para el mayor número de personas y para lograrlo es necesario garantizar que los pacientes con más posibilidades de éxito terapéutico se atiendan primero e incluso “puede ser necesario establecer límite de edad para acceder a los cuidados intensivos”.
Para el 20 de marzo, el Ministerio de Sanidad en España distribuyó el documento Manejo en urgencias del Covid-19, en el que se indica que no se asignarán los recursos al primero que llega, “sino al que más se va a beneficiar del mismo”./EL UNIVERSAL-PUNTOporPUNTO