A seis semanas de asumir el poder, el Gobierno del izquierdista AMLO anunció ayer la liberación de 16 personas a las que considera “presos políticos” y el estudio para la posible puesta en libertad de otros 368 más. “El objetivo principal es que ningún ciudadano sea víctima de represalias por su manera de pensar o por su postura política, que no se fabriquen delitos a opositores o a adversarios, como sucedía”, señaló ayer López Obrador en su conferencia diaria. El Gobierno explicó que muchos de los casos que están estudiando pertenecen a campesinos, activistas o ambientalistas que se han opuesto al fracking, una cuestionada práctica de extracción de gas, o han defendido el uso de sus recursos naturales frente a grandes proyectos de desarrollo. López Obrador ordenó, a principios de diciembre, crear una mesa de acceso a la justicia con el objetivo de evaluar expedientes de personas en prisión que podían haber sido judicializadas injustamente./ EL PAÍS
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