EL CRIMEN ORGANIZADO infiltró las CARAVANAS

Los migrantes son ya su mercancía, advierte Solalinde

El padre Alejandro Solalinde Guerra, director del albergue Hermanos en el camino, reprochó las deportaciones masivas e indiscriminadas que autoridades mexicanas han realizado en fechas recientes. Consideró como una falla de la Secretaría Gobernación (Segob) excluir el apoyo ofrecido por organizaciones civiles y casas migrantes para tratar el tema.

• En entrevista con SinEmbargo, el activista defensor de los derechos de los migrantes explicó que debe existir un equilibrio –y Gobernación lo intenta– entre “la apertura que quiere tener México hacia Centroamérica y el mundo, y cuidar que no entren personas que de alguna manera comprometan la seguridad nacional”. Sin embargo, el sacerdote católico también aludió que la deportación masiva es una incongruencia de las autoridades que dicen buscar el equilibro entre seguridad y derechos humanos:

• “Yo no acabo de entender, no veo para qué dejar entrar a tantas personas si en Veracruz las van a detener o se les va a detener en otro lado y se les regresa, ¿por qué hacer eso?”.

Al menos 204 hondureños fueron deportados a su país el pasado 12 de abril, la mayoría eran familias que viajaban con menores de edad. El traslado se hizo vía aérea de Minatitlán, Veracruz, a San Pedro Sula, en Honduras. Además, dos días antes, la noche del miércoles 10 de abril, un grupo de cubanos que viajaban en autobús con documentos que garantizaban su estancia fueron detenidos por miembros del Instituto Nacional de Migración (INM) en la caseta migratoria de Huehuetán, según reportaron las autoridades.

• Los agentes de migración bajaron del autobús a los cubanos y les quitaron sus documentos personales, como el pasaporte y el amparo que les permitía transitar libremente. La organización “Todo por Ellos” publicó que lograron evitar que siete cubanos fueran detenidos y trasladados a la Estación Migratoria Siglo XXI para su repatriación, mientras que otros no corrieron con la misma suerte, según explicó la propia ONG.

• “El Gobierno tiene que entender que las personas que ya salieron de su país, aunque haya sido con campañas inducidas, [no pueden ser deportadas indiscriminadamente]. El Gobierno tiene que distinguir quiénes pueden regresar y quiénes no. Hay personas que no pueden regresar […] Vienen muchos niños, muchas mujeres, de la forma que sea, aunque hayan pagado para que las lleven al norte –sobre todo a Tijuana–, pero no las pueden deportar porque si las deportan su vida peligra. Entonces debe de haber un programa y para eso estamos las casas y las organizaciones de la sociedad civil, para entre todos buscar una solución humana donde se les pueda acoger, dónde puedan trabajar, donde los niños puedan ser atendidos, que puedan ir a la escuela; pero no pensar que la única solución es la deportación. Esto no es lo que más conviene, no es humano y tampoco es la repuesta que México debe dar a Centroamérica”, reprochó el padre.

• Solalinde reconoció que la situación migratoria en México es muy compleja, porque el Estado tiene la obligación de dar seguridad y cuidar la frontera, y -dijo- Gobernación intenta cumplir con ese deber “tratando de no atropellar los derechos humanos”, sin embargo, opinó que aunque hay funcionarios “bien intencionados”, algunos de ellos no tienen la experiencia de la migración y “solamente se basan en las ideas de seguridad o de lo que tienen que hacer”.

Un grupo de cubanos se dio cita a las 5 de la mañana en el Parque Bicentenario para dar inicio a su “viacrucis” con rumbo al norte del país, algunos de ellos cuentan con amparos federales y número único de trámite ante el Instituto Nacional de Migración, documentos que los avalan en su tránsito por el país. Foto: Cuartoscuro.

Para el presbítero, el Gobierno de México debería buscar a las organizaciones civiles y trabajar de la mano con ellas: “Una falla que yo veo es que Gobernación no se ha juntado todavía con las Casas de Migrante, las organizaciones de la sociedad civil que podrían ayudar. Estamos para eso. Nosotros podríamos ser factor de equilibrio. También por la experiencia podemos ayudar a una buena práctica de las políticas públicas migratorias, no hacer acciones aisladas sino una política bien planeada con acompañamientos y asesoría desinteresada”, dijo.

• El padre reiteró su postura contra “caravanizar” la migración, pues insistió que las caravanas son un error y ya no deberían de existir: “Que quede claro que no hay necesidad de hacer caravanas. Las caravanas deben de pasar a la historia, ya no se deben de hacer, se debe de buscar otra manera de cómo ayudarle a los migrantes”.

• Insistió que estas movilizaciones masivas han sido “inducidas” y se ha filtrado el crimen: “aunque es muy bajo el porcentaje, sí han pasado personas de conductas antisociales y crimen organizado. Hay, aunque no se quiera, tráfico de personas, tráfico de muchísimas cosas, y droga para el norte. Desde hace muchos años la caravana de migrantes no viene sola: ya el crimen organizado se infiltró, ya los migrantes son mercancía. Aprendieron a cómo lucrar, incluso, he observado en algunos casos personas que empezaron como activistas y defensores, de repente ya le van entrando al negocio [tráfico de personas] y empiezan a lucrar con los migrantes.

• Desde el año pasado, Solalinde acusó a la organización Pueblo Sin Fronteras de utilizar a los migrantes centroamericanos y a los mexicanos para pasar a polleros, personas armadas y llevar de forma irresponsable a estas personas a la frontera de Tijuana, Baja California, donde no hay solución.

• “Que quede claro que no hay necesidad de hacer caravanas. Las caravanas deben de pasar a la historia, ya no se deben de hacer, se debe de buscar otra manera de cómo ayudarle a los migrantes”, dijo el padre Solalinde en entrevista con este diario digital. Foto: Cri Rodríguez, SinEmbargo

El retraso en la entrega de visas humanitarias para personas migrantes en México ha provocado enfrentamientos entre agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y centroamericanos que permanecían en Mapastepec, Chiapas. El pasado 13 de abril, migrantes lanzaron piedras y botellas. El enfrentamiento habría iniciado con agresiones verbales hacia personal del INM, luego de que se le notificó a los migrantes que la entrega de la visa para transitar libremente en México se retrasaría.

Ese no fue el primer altercado, un día antes el INM denunció que un grupo de aproximadamente 350 personas migrantes irrumpió de manera violenta en la frontera de México. En un comunicado, señaló que la nueva caravana de migrantes, proveniente de Guatemala, ingresó alrededor “con una actitud agresiva, rompieron el candado que cierra la reja fronteriza e ingresaron al país”, detalló el Instituto en un boletín.

• Al respecto, Solalinde dijo que no hay que calificar como un blanco o negro, o prejuzgar la manera en la que reaccionaron los migrantes en las oficinas del INM, pues comentó que “también ha habido formas inadecuadas de la atención”.

• En relación a la polémica que se suscitó el fin de semana pasado, cuando el defensor de derechos humanos criticó la forma en que periodista Jorge Ramos cuestionó durante una conferencia mañanera al Presidente Andrés Manuel López Obrador, Alejandro Solalinde sostuvo su postura y calificó que la intervención del periodista “fue un exhibicionismo”.

• El padre estimó –a pregunta expresa– que tan desafortunado fue el acto de Jorge Ramos, como el discurso y los ataques vertidos por el mismo AMLO contra la prensa y sociedad civil utilizado términos como “fifí”./SIN EMBARGO-PUNTOporPUNTO

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