Vandalismo, robo de cable, derribamiento de torres, instalación o de equipos por parte del crimen organizado en sus antenas, hurto de señales de TV de paga que se venden por internet bajo un esquema de “Netflix pirata”, son los delitos que aquejan a las empresas de telecomunicaciones en México y que se mantienen en aumento.
Entre 2016 y lo que va de 2020, Telmex ha registrado más de 30 mil robos de cable, un ilícito que registró un aumento de 21.3 por ciento desde esa fecha, según datos compartidos por la empresa a El Heraldo de México.
- A su vez, Telefónica Movistar detalló que en 2019 tuvo menos de 40 eventos por robo o vandalismo; ATT señaló que las torres con las que opera en su mayoría pertenecen a terceros, y los ingenieros que las mantienen también, por lo cual no cuenta con datos.
- El modus operandi de las bandas que se dedican a esta actividad consiste en romper banquetas o postes para extraer el cableado, fundirlo y después venderlo por kilo a las recicladoras que lo adquieren hasta por 97 y 146 pesos, de acuerdo con datos de la industria.
- Para Salomón Padilla, vicepresidente de la Asociación de Telecomunicaciones Independiente de México (ATIM), también se cometen robos de señales de televisión de paga, en donde se han detectado por lo menos 10 empresas pirata que toman la señal y luego venden suscripciones bajo un modelo similar al de Nefflix, donde cobran una renta para acceder a los contenidos por internet.
- El crimen organizado también afecta a empresas, pues tiran sus antenas para evitar que sean rastreados en las redadas de las autoridades, o instalan allí sus equipos para colgarse de la señal y establecer sus comunicaciones, dijo.
“Se roban las baterías de las torres o usan el ácido para hacer droga y el plomo lo venden”, comentó el directivo.
Fernando Negrete, consultor en telecomunicaciones, afirmó que este tipo de delitos tienen mayor presencia en entidades con elevado nivel de presencia de la delincuencia organizada, como en Sonora, Chihuahua, Jalisco, entre otros, con especial énfasis en las zonas rurales./EL HERALDO DE MEXICO-PUNTOporPUNTO