Considerado por el presidente Andrés Manuel López Obrador como «faraónico», «un exceso», «un derroche», «un lujo» y «un insulto» heredado por gobiernos pasados, el avión presidencial sigue generándole gastos a la actual administración. A un año de que el propio mandatario propuso rifarlo, rentarlo, venderlo o intercambiarlo, el TP01 José María Morelos y Pavón permanece en territorio mexicano, y su conservación hasta ahora ha costado al erario más de 400 millones de pesos.
- Desde el inicio de este sexenio en 2018, el gobierno de López Obrador ha pagado 33 millones de pesos para el mantenimiento del vehículo en Estados Unidos, 286 millones de pesos para la organización de la rifa alusiva realizada en 2020 y alrededor de 83 millones de pesos desde que la aeronave volvió a México. Esto significa que la presente administración le ha destinado 402 millones de pesos.
Una historia con turbulencia
Desde antes de ganar la presidencia en 2018, López Obrador criticó el uso del avión y prometió venderlo. En cuanto inició su gobierno, envió la aeronave al aeropuerto de California, en Estados Unidos, para que se le diera mantenimiento por 19 meses.
- Durante dos años, López Obrador ha buscado vender el Boeing Dreamliner que la gestión de Felipe Calderón adquirió y que tuvo sus primeros vuelos con Enrique Peña Nieto, para lo cual incluso elaboró un folleto para promocionarlo como «orgullo de la nación», «la aeronave más emblemática del continente» y «de avión presidencial a pináculo de la aviación empresarial del mundo».
Sin embargo, la venta no se ha concretado, y para el mantenimiento de la aeronave durante 19 meses la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) acordó una orden de servicio con la compañía Boeing, cuyo fin era que se brindara mantenimiento al vehículo. El costo anual de esto fue de 719,321 dólares, que a un tipo de cambio aproximado de 20 pesos se tradujeron en 14 millones 386,420 pesos, según se detalló a Expansión Política a través de una solicitud de información.
Aún sin comprador, en enero pasado López Obrador propuso cinco opciones para deshacerse del avión mientras llegaba una oferta que pagara su valor de 2,500 millones de pesos.
Entre las posibilidades, planteó venderlo, rifarlo, un trueque por equipo médico, rentarlo por hora o que 12 interesados adquirieran en partes iguales la aeronave.
Días después, su gobierno decidió rifarlo, pero aclaró que solo sería un sorteo simbólico, pues el premio no sería el TP01 como tal, sino 100 premios de 20 millones de pesos cada uno.
Mientras en México se vendían los boletos para la rifa, el gobierno determinó que el avión volvería a volar, pero solo de regreso al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. De acuerdo con la Sedena, en Estados Unidos se pagaron 1.7 millones de dólares por el mantenimiento de la aeronave durante 19 meses, que al tipo de cambio correspondiente representan alrededor de 33 millones 657,000 pesos.
De acuerdo con la Sedena, el costo anual de operación y mantenimiento del avión presidencial en México, lo que incluye 800 horas de vuelo, es de 199 millones 998,400 pesos. Este es el desglose:
- Combustible: 70 millones 046,400 pesos.
- Sueldos de la tripulación (ocho miembros): 4 millones 047,200 pesos.
- Póliza de seguro: 50 millones de pesos.
- Mantenimiento anual de la aeronave: 57 millones 600,000 pesos.
- Adiestramiento de la tripulación (un año): 304,800 pesos.
- Actualización de software: 18 millones de pesos.
En promedio, para la operación y el mantenimiento del avión, el gobierno federal debe pagar cada mes 16 millones 666,533. Por ello, si se toma esa cantidad como base, desde que la aeronave regresó a México se han pagado 83 millones 332,666 pesos.
Otro gasto que realizó el Ejecutivo en torno al avión fue la realización de la rifa del pasado 15 de septiembre.
A cargo de la Lotería Nacional, el gobierno erogó 286 millones de pesos para el «El gran sorteo especial 235» , que tuvo 2,000 millones de pesos en premios.
- La Lotería Nacional reportó a Expansión Política, vía la Plataforma Nacional de Transparencia, que en comisiones a vendedores de ‘cachitos’ se pagaron 50 millones 054,700 pesos; en sueldos, prestaciones y seguridad social de todo el personal que intervino en el sorteo, 24 millones 931,790 pesos, y en el costo de la impresión de ‘cachitos’, 1 millón 131,000 pesos.
- Mientras tanto, para ayudas, subsidios y transferencias, que se refieren a los costos asociados a los servicios que otorgan los vendedores de los billetes, como atención médica y actividades culturales, se destinaron 29 millones 533,892 pesos.
Hoy, a más de dos años de iniciado este gobierno, el avión aún no tiene un comprador, y aunque según el presidente se realizó un anticipo desde mediados del año pasado, la operación no se ha concretado.
¿Cuánto se debe?
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, explicó a mediados del año pasado que entre 2021 y 2027 el gobierno de México aún debe pagar alrededor 4,000 millones de pesos.
«En noviembre del 2012 se suscribió un contrato de arrendamiento financiero entre la Secretaría de la Defensa Nacional y Banobras por el término de 15 años. Este arrendamiento tenía un costo de 6,094 millones de pesos», afirmó el general Sandoval tras la llegada del vehículo al país./EXPANSIÓN-PUNTOPORPUNTO