Está más que claro que existe un riesgo de que si el exgobernador de Campeche Alejandro Moreno Cárdenas se convierte en el presidente del PRI, ese partido se transformará en un satélite del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, aseveró Ivonne Ortega Pacheco.
- En entrevista, la candidata a la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de ese instituto político aseguró que hay un acuerdo entre el expresidente Enrique Peña Nieto con el presidente López Obrador para que éste tenga el control del partido.
- Sin embargo, “nosotros no lo vamos a permitir; por eso estamos luchando, yo, junto con los militantes que me acompañan, que son la mayoría, que están cansados de acuerdos cupulares, de los acuerdos en lo oscurito, donde los beneficiados son unos cuantos y que perjudica a la gran mayoría”, agregó.
- A 12 días de que se celebre la elección, la exgobernadora de Yucatán aseguró que tiene todas las posibilidades de ganar, aunque dijo: “Tenemos que cuidar que no nos vayan a embarazar las urnas, porque ellos (los partidarios de Alejandro Moreno Cárdenas) están pensando ganar la elección así; están pensando en robarse la elección con las viejas prácticas”.
Dijo que tiene evidencia de que se están preparando este tipo de acciones en Tamaulipas, Coahuila y Oaxaca, así como en otras entidades, donde, destacó, “están tratando de hacer elecciones de Estado, cuando es lo que los militantes ya no quieren”.
En ese sentido, señaló que es necesario que los priistas voten en libertad y a conciencia el próximo 11 de agosto, porque lo que está en juego es la sobrevivencia del partido y, por ello, quien debe ser el próximo presidente del tricolor debe ser alguien que no tenga acuerdos oscuros con nadie; que el único compromiso que tenga sea recuperar el partido, darle viabilidad política y lograr que sea un contrapeso al poder político del presidente López Obrador.
Al preguntarle cuál es su relación con los gobernadores priistas y cómo se han comportado en este proceso interno, dijo: “Yo tengo buena relación con ellos. Ellos han mostrado a su candidato (…) Esos gobernadores aceptaron la instrucción del gobierno actual; nosotros, como militantes no podemos permitir que exista un partido satélite”.
Al preguntarle cuál debe ser la narrativa del PRI en estos momentos, contestó que en el estatuto está como social-demócrata, “pero honestamente, lo que menos están siendo es social-demócratas. Inclusive, en el gobierno del presidente Peña Nieto se aprobaron cosas mucho más neoliberales que otra cosa”.
Asimismo, mencionó que “nosotros más que tener que definir nuestra postura, hay que preguntar a los militantes cuáles son sus posiciones, cuáles deben ser nuestras causas y cuando nos elijamos, como lo hacemos, en una gran asamblea nacional, en donde estén discutiéndose en todo el territorio, en todos los municipios del país el tiempo que sea necesario, pero que tengamos la claridad de cuál es el partido que nuestros militantes quieren, entonces podré decir si es social-demócrata, si es liberal o revolucionario, lo que vaya dictando la militancia”.
- Luego, afirmó que el PRI tiene a la mejor estructura de los partidos a escala nacional, “nada más que esa estructura está molesta, está dolida, se siente utilizada y, por consecuencia, en el mejor de los casos quiere participar”.
- La también exgobernadora de Yucatán expuso que mucha de esa estructura “nos dio la espalda en el 2018”, por ello es muy importante que sean escuchados, para que puedan reconciliarse con sus dirigentes y entre priistas en general y , consecuentemente, el PRI pueda reconciliarse con la sociedad.
- Por eso planteó que es muy importante que se reconozca que en el tricolor existe la necesidad de cambiar drásticamente y dar la oportunidad a la militancia de que proponga.
- “Hay que regresar al origen, escuchar y reconocer los liderazgos, quitar definitivamente la cultura del amiguismo, del compadrazgo, que es lo que lastima mucho a la militancia y que la mantiene lejos todavía”, añadió./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO