Como opositor, Andrés Manuel López Obrador criticaba la actitud “sumisa” de Enrique Peña Nieto frente a Donald Trump y calificaba como “perverso” utilizar al Ejército para tareas de seguridad pública. Sin embargo, ya como presidente, su discurso y posición cambiaron, aunque no ha sido así con las contradicciones que ha seguido acumulando.
López Obrador llega al primer tercio de su administración con estas y otras contradicciones que han sido cuestionadas desde distintos frentes. A continuación presentamos una selección de temas, en los que el presidente ha refutado sus propias palabras.
Aportaciones, no corrupción, o el Caso Pío López
Uno de los casos más polémico se suscitó con el video en el que se ve a Pío López Obrador, su hermano, recibiendo dinero de David León, extitular de Protección Civil que al momento de la grabación, 2015, era colaborador del gobierno de Chiapas. El material se esparció rápidamente y le valió críticas al presidente, no solo por involucrar a uno de sus familiares, sino por la justificación que dio.
- La grabación se dio después de que salieran a la luz otros videos en los que se ve a asesores de legisladores del PAN recibiendo dinero supuestamente producto de sobornos del extitular del Pemex, Emilio Lozoya, para la aprobación de la reforma energética impulsada por el expresidente Enrique Peña Nieto.
En conferencia de prensa, López Obrador señaló que el caso de Lozoya era un acto de corrupción y “extorsión”, puesto que los recursos habían sido para beneficiar a políticos de oposición, mientras que el caso de su hermano aseguró que solo se trataba de aportaciones al movimiento que él fundó.
¿A favor o en contra de enjuiciar expresidentes?
Desde 2018, López Obrador ha manifestado su postura sobre enjuiciar o no a expresidentes mexicanos. A partir de entonces, ha insistido en que se le tiene que preguntar a la ciudadanía si quiere o no que esto ocurra.
- En cuanto a su postura, aunque ha dicho que él no está a favor de esto, él mismo presentó una iniciativa para la realización de la consulta.
- El 15 de enero de 2019, en su conferencia mañanera, retomó el asunto y señaló que “la crisis en México tiene que ver con la política llamada neoliberal, una política de pillaje que se aplicó en ese periodo” y que, por esa razón, se le iba a preguntar a la gente si habría juicio contra Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto.
En junio de ese año, señaló que la consulta para enjuiciar a expresidentes mexicanos por actos de corrupción se realizará solo “si es indispensable” y si es “mucha la exigencia de la gente”, pero insistió en que no hay que estar “anclados en el pasado”.
Para septiembre de 2019, volvió a decir que su gobierno no era partidario de iniciar denuncias contra administraciones pasadas, sino de ver hacia delante. “Lo pasado, pasado”, dijo en un evento con la comunidad del hospital Rural Matamoros.
Ya este año con la pandemia de COVID-19 encima, se realizó una recopilación de firmas para presentar la propuesta de consulta ciudadana al respecto, al no conseguirse el número requerido, el mandatario emitió una iniciativa con una pregunta en la que ya no planteaba la opción de que si estaban –como él lo había dicho– a favor de poner “punto final”.
- La pregunta fue modificada y finalmente aprobada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y el Congreso de la Unión, por lo que la consulta se celebrará en agosto de 2021, dos años y nueve meses después de que se planteó el tema.
¿Trump autoritario o amigo de México?
Como opositor y candidato, López Obrador criticó al entonces presidente Enrique Peña Nieto, por callar y actuar de manera sumisa ante los descalificativos de Donald Trump. Incluso escribió el libro “Oye Trump”, en el que proponía la defensa de los migrantes ante la «actitud autoritaria» del presidente de Estados Unidos.
- En 2017, criticó la «actitud sumisa» del presidente Peña y advirtió que incluso interpondría una denuncia ante la Organización de las Naciones Unidas por violación a los derechos humanos y discriminación racial, si el gobierno del priista no lo hacía.
- López Obrador criticó la propuesta de Trump para construir un muro y las amenazas que dirigía hacia México. “Porque vamos sin balandronadas, sin amenazas, de manera responsable a defender la soberanía de México», dijo días antes de la toma de posesión de Trump.
Sin embargo, al llegar a la presidencia, el tono de López Obrador hacia Trump fue más amable y amigable, y hasta ofreció colaboración con su gobierno para frenar la migración centroamericana hacia Estados Unidos.
Incluso hizo a un lado su postura de no viajar al exterior y realizó su primer y único viaje fuera del país para reunirse con Donald Trump.
¿Limpiar a todo el Ejército?…. o mejor no
Tras la detención del general Salvador Cienfuegos, secretario de la Defensa Nacional durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que el “solo señalamiento de funcionarios” implicaría el retiro de sus cargos, aun sin que concluyan las investigaciones.
- Un día después, luego de que la noticia conmocionó al Ejército, el Ejecutivo federal matizó su postura de «limpiar» de todos los excolaboradores de Cienfuegos que sean «señalados”, e indicó que no se puede calificar a toda la institución por la conducta de un general. «No es justo culpar a toda la oficialidad del Ejército, de estar involucrada en este caso», aseveró.
Usar al Ejército para la seguridad
En septiembre del 2013, tras haber perdido por segunda ocasión la elección presidencial, López Obrador criticó el uso del Ejército para atender la inseguridad pública. Una situación que cambiaría con su llegada al poder y con el uso que ha dado a las fuerzas armadas en distintas tareas.
El pasado 11 de mayo, se publicó un decreto por el que se dotó al Ejército y la Marina de atribuciones extraordinarias de seguridad pública, para que actúen en respaldo de la Guardia Nacional hasta el 27 de marzo de 2024./EXPANSION-PUNTOporPUNTO