Al inaugurar el estadio de beisbol de los Diablos Rojos del México, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue abucheado y recibió rechiflas de aficionados. Al tomar nota de la inconformidad, dijo que se trató de la porra del equipo fifí, al cual voy a seguir tirando pura pejemoña, los voy a seguir controlando con lisas, con rectas de 95 millas y con curvas. Vamos a seguir ponchando a los de la mafia del poder.
- Desde su arribo al Estadio Alfredo Harp Helú, acompañado de este empresario, el mandatario fue objeto de expresiones en contra, incluidos algunos gritos de ¡fuera, fuera, fuera!, y silbidos de mentadas, que se entremezclaron con aplausos.
- Enfundado en una chamarra del equipo local, López Obrador –junto con su hijo menor, Jesús Ernesto; la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y la titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, Ana Gabriela Guevara, entre otros– se dirigió al montículo donde pudo ver la división que su presencia provocó entre los aficionados.
- En medio de ese ambiente, donde prevalecieron las manifestaciones de rechazo, expresó su gusto por inaugurar lo que consideró un extraordinario estadio de beisbol, en el que ha sido su discurso más corto, de 2 minutos 55 segundos.
- No voy a hablar mucho, porque hay algunos de la porra del equipo fifí, pero la mayoría de la gente está en favor del cambio y del rey de los deportes: el beisbol, sostuvo.
- Garantizó que impulsará todos los deportes; desde luego el beisbol infantil, juvenil, amateur, profesional, porque el beisbol es más que un deporte, es una pasión fecunda que requiere de cabeza, de corazón y de carácter.
- Agradeció a Alfredo Harp Helú, el principal promotor del beisbol en México, la invitación que le hizo, y ahora sí vamos a pichar, les voy a seguir tirando pura pejemoña, los voy a seguir controlando con lisas, con rectas de 95 millas y con curvas.Vamos a seguir ponchando a los de la mafia del poder, subrayó.
Entonces tomó un guante negro y lanzó, como pítcher, la primera bola para dar paso al partido de exhibición entre Los Diablos Rojos y los Padres de San Diego. Harp Helú, de catcher, recibió la pelota.
Posteriormente, siempre acompañado del empresario, se dirigió al palco principal para disfrutar el primer tercio del juego.
- Previamente, Harp Helú le dio la bienvenida al paraíso de Los Diablos Rojos del México, tras recordar que siempre los estaban cambiando de estadio. Agradeció al Presidente su presencia. Él ama el beisbol como yo, y ahora tengo que mencionar que México siempre juega en equipo, pero ahora va a redoblar sus esfuerzos para jugar en equipo. México es el campeón y seguirá siendo el campeón. Vamos a trabajar todos juntos.
- Pidió escuchar con respeto al mandatario, pero sus palabras no tuvieron el eco esperado.
- El maestro de ceremonias recordó que desde hace 50 años no se inauguraba un estadio de beisbol./LA JORNADA-PUNTOporPUNTO
AMLO ya comenzó a perder simpatías a paso acelerado y no lo quiere ver. Allá él.
Hoy a quienes lo abuchean los desdeña como una “minoría fifí”, que de seguir como va, más tarde será una mayoría. Corregirá el rumbo? (Lo dudo)pic.twitter.com/TjdtkJSNl4
— Guillermo Barba (@memobarba) March 24, 2019