La piel suele ser el catalizador del funcionamiento interior del cuerpo, y es el órgano que está más expuesto al ambiente; además ayuda a regular la temperatura del cuerpo, a eliminar toxinas y es una barrera que impide que microorganismos nocivos penetren en el cuerpo. A pesar de estas funciones vitales para el organismo, no siempre tomamos las medidas para darle un cuidado correcto.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año fallecen más de 62 mil personas en el orbe a causa del melanoma; una de las formas más peligrosas y mortales de cáncer de piel. Este padecimiento se desarrolla en las células que producen melanina, sustancia encargada de dar color a la piel.
Según datos del Instituto Nacional de Cancerología (INCan) en México se ha incrementado en más de un 500 por ciento este tipo de neoplasia en los últimos años. De continuar esta tendencia para el 2020 el melanoma se convertirá en el cáncer más frecuente. Se estima que más de la mitad de los pacientes son diagnosticados en etapas avanzadas –como sucede en la mayoría de los diferentes tipos de cáncer- con un pronóstico de vida menor a ocho meses.
De ahí que no estaría de más que nos diéramos un tiempecito para ver el video informativo “El A B C D E del Melanoma” el cual hace referencia a estas cinco letras que pueden cambiar la vida de muchas personas. Esta guía que realizó la ASOCIACIÓN mexicana de Lucha contra el Cáncer (AMLCC) nos permitirá detectar oportunamente cualquier anomalía en la piel.
El A B C D E del Melanoma se enfoca a identificar cambios en los lunares del cuerpo, considerando principalmente los siguientes factores:
- Asimetría: una mitad del lunar no es igual a la otra mitad en tamaño, forma y grosor.
- Bordes: los bordes del lunar son irregulares o desiguales.
- Color: el color no es uniforme en todo el lunar, tiene una mezcla de colores rojizos o negros azulados.
- Diámetro: el tamaño del lunar es mayor al de un botón de camina y,
- Evolución: el lunar evoluciona hacia un tamaño mayor o hacia cambios de forma y color.
Reconocer alguna de estas señales es la clave para detectar el melanoma a tiempo y de esta manera salvar la vida.
En el IPN crean herramienta para detectar Cáncer de Piel
Como una contribución en la detección temprana de cáncer de piel, estudiantes de la Escuela Superior de Cómputo (ESCOM) crearon un sistema computacional que analiza y procesa fotografías tomadas por un dermastocopio, le cual permite identificar el Carcinoma Basocelular (CCBC) en etapa incipiente.
Este tipo de displasia se presenta por lo general en forma de manchas rojizas en cara y cuero cabelludo. Crece de manera lenta y rara vez produce metástasis, pero tiene capacidad destructiva local y daña extensas áreas de tejido, cartílago y en ocasiones hueso.
Mediante algoritmos de reconocimiento de patrones, Francisco Araujo Pérez, Juan Antonio González Esteban y Cristian Olvera Morales lograron que su prototipo identifique las propiedades más comunes del CBC para seleccionar sólo aquellas imágenes que presentan los rasgos de la enfermedad.
Una vez elaborado el preprocesamiento de la imagen emplean técnicas de análisis de objetos en imágenes y algoritmos de reducción para lograr una segmentación efectiva. Con ello consiguieron eliminar todos los elementos que no presentan relación alguna con el CBC y aislar las células basales para su estudio.
Posteriormente el sistema analiza en cada una cinco parámetros: bifurcaciones, área, perímetro, longitud y color. Una de sus características es la presencia de ramificaciones, si son más de dos se les conoce como arbonizados.
El sistema servirá de referencia para el médico porque indica cuando la fotografía cuenta con células basales con posible presencia de cáncer. Así, esta herramienta permitirá al especialista tener un prediagnóstico efectivo que evitará la realización de biopsias a los pacientes cuyas imágenes no estén relacionadas con el CBC y que generalmente son cortes profundos de entre cuatro y siete milímetros.
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