El paso del huracán Otis y la incidencia delictiva que se registra en la entidad han colocado a Guerrero en medio de dos emergencias; una, provocada por la inseguridad que se vive en la entidad, y la otra, por los estragos de la catástrofe natural.
Mientras los pobladores padecen las consecuencias de ambas emergencias, el gobierno federal anunció ya algunas de las acciones que realizarán en los siguientes días para hacer frente a las problemáticas sociales.
Este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó sobre la creación de 38 nuevos cuarteles de la Guardia Nacional y el despliegue permanente de 10,000 elementos en Guerrero, con el objetivo de garantizar la paz y la tranquilidad y que continúe la llegada de turistas a Acapulco.
La emergencia de inseguridad en Guerrero
Si bien en los últimos días, tras el impacto de Otis, en Acapulco impera un clima de incertidumbre debido a la pérdida de vidas humanas y de bienes materiales, desde hace varios meses atrás la población ha enfrentado la inseguridad.
- Apenas unos días antes del impacto del huracán, se registraron varios hechos violentos, entre ellos, el ataque armado del pasado 23 de octubre en donde fueron asesinados 11 policías de Coyuca de Benítez.
- El atentado se produjo cuando el secretario de seguridad local se desplazaba con su escolta por una zona rural.
- 2023 ha sido hasta ahora un de los años más violento de los últimos cuatro años en Guerrero, pues los homicidios, enfrentamientos, bloqueos e incendios de vehículos son otros de los hechos de violencia que se han registrado en la entidad gobernada por la morenista Evelyn Salgado Pineda.
De acuerdo con el último Informe de Seguridad que el gobierno de México presentó el pasado 17 de octubre, Guerrero se encuentra entre las 10 entidades con más homicidios dolosos.
De enero a septiembre de 2023, en Guerrero fueron asesinadas 1,280 personas, colocándose como la séptima entidad con más homicidios dolosos, por debajo de Michoacán (1,343 homicidios); Jalisco (1,511homicidos); Chihuahua (1,596); Baja California (1,810); Estado de México (2,022) y Guanajuato (2,422), entidad que ocupa el primer lugar.
- Si bien la violencia en Guerrero no es un problema nuevo –pues desde hace varios años, esa entidad es disputada por al menos 16 organizaciones criminales , entre ellas el Cártel Jalisco Nueva Generación, Guerreros Unidos, Los Viagra, Los Ardillos y La Nueva Familia Michoacana, de acuerdo con un reporte de la Secretaría de la Defensa Nacional–, los esfuerzos que el gobierno de López Obrador hace para disminuir la seguridad no son suficientes.
En octubre de 2021, López Obrador puso en marcha el «Plan de Apoyo a Guerrero», mediante al cual, dijo entonces, se reforzaría la seguridad pública y buscaría reducir la incidencia delictiva. Sin embargo, los números han demostrado que esa estrategia no ha funcionado, pues antes de que se implementara el Plan, la entidad reportaba, entre enero y septiembre de 2021, 1,038 homicidios y en el mismo lapso pero de este 2021, los asesinatos suman 1,280.
En medio de la emergencia por Otis, un nuevo plan de seguridad
Ahora, tras el paso de Otis, cuyo saldo al día de hoy es de 47 muertes y 59 personas desaparecidas , el gobierno federal informó que, como parte del plan de reconstrucción en Guerrero, se instalarán nuevos cuarteles de la Guardia Nacional.
- El pasado 1 de noviembre, en conferencia matutina, como parte del “Plan General de Reconstrucción y Apoyo a la Población Afectada en Acapulco y Coyuca de Benítez por el Huracán Otis. 1ra Etapa”, el cual se compone de 20 puntos , López Obrador anunció que “se establecerá en cada colonia de más de 1,000 viviendas, un cuartel de la Guardia Nacional con 250 elementos en cada uno».
De acuerdo con el mandatario, se busca garantizar la paz y la tranquilidad de los ciudadanos y evitar los robos en vivienda, establecimientos comerciales, gasolinerías, en el transporte de mercancías y en la distribución de gas.
- Este lunes 6 de septiembre, el mandatario federal dijo que se construirán 38 cuarteles de la Guardia Nacional en Acapulco y explicó que en las nuevas instalaciones trabajarán de forma permanente 10,000 agentes de la Guardia, quienes actualmente fueron desplegados para atender la emergencia generada por Otis.
- Luego de que Otis azotó Guerrero, el clima de inseguridad se exacerbó: en tiendas, casas, hoteles y negocios se registraron varios saqueos y robos, por lo que, con los escombros que el huracán dejó, los habitantes se vieron orillados a crear barricadas y se armaron con machetes, palos y piedras.
Aunque al día de hoy la seguridad en Acapulco ya fue reforzada, a 12 días de que el huracán tocó tierra, en Guerrero se siguen contabilizan homicidios dolosos, al menos 21 homicidios, según información de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS).
El día más violento se registró el pasado 2 de noviembre, en plena celebración del Día de Muertos, mientras que se mantuvo un saldo blanco el 28 y 29 de octubre. Durante los demás días los homicidios oscilaron de uno a tres casos.
«El desastre no debe ser pretexto para militarización»
La organización México Unido Contra la Delincuencia (MUCD) alzó la voz el pasado 1 de noviembre e hizo un llamado para que, ante la situación de emergencia en distintos municipios costeros de Guerrero por el paso del huracán Otis, «los gobiernos federal, estatal y municipal presenten públicamente una estrategia de seguridad ciudadana integral de corto, mediano y largo plazo, distinta a la del despliegue indiscriminado de fuerzas militares y del establecimiento de cuarteles militares de la Guardia Nacional».
«Es apremiante atender en el corto plazo la seguridad de las familias afectadas, pues reportes de prensa y habitantes destacan que a la carencia de insumos y servicios básicos se suma una profunda preocupación por su integridad y seguridad, por ejemplo, ante el aumento de intentos de robos a casa habitación, pero esto no debe ser un pretexto para profundizar la militarización de la entidad», apuntó la organización.
- México Unido Contra la Delincuencia hizo hincapié en que esta estrategia integral de seguridad para Guerrero debe incluir a todos los actores sociales civiles, pues «la seguridad pública está constitucionalmente a cargo de policías y fiscalías».
«La intervención militar debe estar coordinada por autoridades civiles y centrada en tareas de auxilio, atención a daños, salvamento, aprovisionamiento y servicios estratégicos como restablecimiento de infraestructura y de seguridad extraordinaria y temporalmente –por ejemplo, en áreas rurales afectadas–, pero sin excluir con esto la participación de otros actores sociales que puedan prestar auxilio social».
«La respuesta no puede ser sólo militar y muchísimo menos pretender que la solución será la presencia indiscriminada de militares y cuarteles de la Guardia Nacional –un cuerpo de seguridad militarizado– sin definir temporalidad y objetivos», apuntó.
México Unido Contra la Delincuencia destacó que importante el restablecimiento de servicios de infraestructura, refugio, víveres, salud y alimentos, además de la protección a la seguridad e integridad de las familias./Agencias-PUNTOporPUNTO