La estrategia emprendida por el gobierno en materia energética requiere de personal capacitado, sin embargo, en México existe un déficit de profesionistas que puedan poner en marcha procesos para hacer más competitivo el sector
El sector energético vive una doble realidad. Las oportunidades laborales que ofrece son amplias, pero esto no ha despertado un mayor interés en los estudiantes universitarios mexicanos.
- La industria se está transformando y cada vez requiere de más personal calificado en la materia y, con el cambio de paradigma en la mentalidad de los jóvenes, los jugadores del mercado se enfrentan a la difícil tarea de ocupar asientos clave al interior de sus organizaciones.
- En la actualidad, más de 60 mil profesionistas a nivel nacional estudian alguna carrera relacionada con las áreas de electricidad y generación de energía, de los cuales 94 por ciento son hombres y solo 6 por ciento mujeres, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y el Colegio de Ingenieros Petroleros de México (CIPM).
- Aunque la remuneración mensual promedio es de aproximadamente 26 mil pesos, la matrícula estudiantil es baja al tomar en cuenta que en carreras como Medicina o Derecho el número oscila entre los 143 mil y 356 mil alumnos, respectivamente, con un salario de 17 mil pesos.
- Con la apertura del sector energético en 2013 también se abrió una ventana en la que empresas privadas comenzaron a buscar a expertos técnicos en tres áreas: ingeniería petrolera, geociencias y ciencias de la tierra especializados sobre todo en los sectores upstream (exploración y producción) y downstream (refinación).
- Las ofertas laborales existen, pero hay pocos profesionistas que pueden desempeñar labores de diseño, de análisis de procesos y de generación de modelos relacionados a estos segmentos.
- Estimaciones de la Secretaría de Energía (Sener) y diversas universidades públicas y privadas en el país revelan que para poder cubrir la demanda laboral se necesitan 135 mil nuevos técnicos especializados en todas las materias vinculadas a los hidrocarburos. Cifra muy lejana a la actual matrícula nacional.
- Arturo Carranza, analista de energía, adjudica este desinterés de las nuevas generaciones de alumnos a la falta de políticas educativas orientadas al desarrollo humano.
La labor para encontrar ingenieros petroleros es complicada, pero al momento de mirar hacia las energías renovables la tarea es aún más difícil.
Este perfil no solo necesita tener habilidad para conceptualizar, diseñar y operar de manera eficiente sistemas de aprovechamiento de las fuentes renovables y de la infraestructura, también requiere de conocimientos sobre responsabilidad ecológica, ética y social.
Además de la UNAM, otras instituciones de enseñanza superior que imparten la Ingeniería en energías renovables son la Universidad de Quintana Roo; Universidad Politécnica de Chiapas; Universidad Autónoma Metropolitana; Universidad Politécnica de Chiapas, y la Universidad Veracruzana.
- El sueldo base promedio es de 30 mil pesos, en tanto que los puestos de una mayor jerarquía llegan a escalar hasta los 80 mil pesos mensuales, de acuerdo con los tabuladores disponibles en el Observatorio Laboral y ManpowerGroup.
- Las energías verdes como eólica, solar, hidráulica, biomasa, geotérmica y mareomotriz tienen un gran potencial en territorio nacional, gracias a la posición geográfica de México.
- Se espera que en los próximos 13 años las inversiones en este segmento asciendan a 29 mil millones de dólares y generen más de 200 mil empleos directos e indirectos, revela un informe de la Asociación Mexicana de Energía Solar (Asolmex).
- Aunque la oferta educativa en temas de energías renovables aún es escasa en contraste con los hidrocarburos, poco a poco las universidades comienzan a incluir en sus planes de estudio materias relacionadas con este segmento.
- La Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos (AMEDIRH) estima que solo un plantel del CONALEP ofrece la carrera de conservación del medio ambiente.
- Erick Sánchez, especialista en energía, opina que el potencial de las ingenierías limpias es muy grande, sobre todo porque lleva implícito el tema de la consciencia de cuidar al planeta.
- “Este tipo de perfil ha evolucionado mucho porque los profesionistas tienen un nivel de especialización mucho mayor, ya que sus funciones son más operativas y no tanto de campo”.
En México hay un déficit de ingenieros, a diferencia de países como India o Estados Unidos donde los jóvenes cada vez están más interesados en estas áreas porque existe un vínculo entre la academia y el sector energético que incentiva su desarrollo académico. – Arturo Carranza, Analista de energía/REPORTE INDIGO-PUNTOporPUNTO