En el caso del conflicto entre IEnova y Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo más importante es que se conecte el ducto Texas-Tuxpan, que ya está concluido y elevará el abasto de gas natural en 40%, y por otro lado, que las partes logren acuerdos sobre las cláusulas del contrato, dijo el presidente del CCE, Carlos Salazar Lomelín.
El dirigente empresarial alertó que el conflicto entre la empresa canadiense constructora del gasoducto marino Texas-Tuxpan y la CFE impide garantizar el abasto de gas natural al sureste del país para evitar apagones como los ocurridos en días pasados, y genera la percepción de que no se está respetando la legalidad. “Ese mensaje implica riesgos, incluso para la aprobación del T-MEC en Estados Unidos y Canadá”.
- “Más allá del diferendo, el ducto Texas-Tuxpan se debe conectar. La discusión puede tardar dos años; no podemos esperar tanto tiempo. Lo ideal es conectar el tubo y que se distribuya el gas”, explicó.
- Con el ducto Texas-Tuxpan, aseveró, aumentará 40% la capacidad de importar gas al país. “Sería la mayor fuente de suministro; podríamos llevarlo al sureste y garantizar que no haya más apagones”.
Daño colateral
A raíz de la intención de CFE de modificar el contrato con IEnova, ha surgido una situación convergente de riesgo: que el tema se convierta en un argumento político para los legisladores demócratas en la aprobación del T-MEC en el Congreso de Estados Unidos, que todavía está en curso.
- “Los riesgos son que (los demócratas) tomen esto como un elemento de presión, y por otro lado, que las compañías agraviadas, canadienses, utilicen el tratado para presionar a su propio gobierno y que reaccione atrasando la firma del T-MEC”, advirtió.
- Aclaró que solicitar un arbitraje ante un diferendo en un contrato no es algo excepcional, hay muchos que han ido a arbitraje, muchos en el sector de energía. Entonces, no es excepcional plantear que se ponga en operación el ducto y paralelamente resolver el problema conforme a la ley.
- Salazar Lomelín afirmó que han planteado el tema a Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, y que él ha reivindicado su posición. “Alfonso es de la misma opinión que nosotros, tratar de que se respete la legalidad y que el activo tenga posibilidades de utilizarse”.
El CCE está dispuesto a ser un mediador entre las partes para encontrar una solución, siempre con apego a la ley y sin caer en conflictos de interés.
El titular del CCE dijo que están buscando una cita con el presidente. “Espero que nos la den en los próximos días. Ofrecernos nuestros oficios como mediadores”.
Cabe recordar que el consorcio conformado por IEnova y TC Energía (antes Transcanada), denominado Infraestructura Marina del Golfo (IMG) informó que la CFE le envió una solicitud de inicio de arbitraje mediante la cual demanda la nulidad de ciertas cláusulas del contrato de servicios de transporte del gasoducto marino Texas-Tuxpan, cuya construcción concluyó apenas hace dos semanas.
El Gasoducto Marino Sur de Texas – Tuxpan, con una inversión de más de 2,500 millones de dólares, es uno de los proyectos de infraestructura más importantes del país en los últimos años y tiene capacidad de transportar 2,600 millones de pies cúbicos diarios de gas natural, incrementando la capacidad de importación de este hidrocarburo a México en aproximadamente 40% y asegurando el abastecimiento a zonas que hoy presentan déficit de suministro.
IMG aclaró que esta solicitud de arbitraje de ninguna manera impide que la CFE emita la constancia de aceptación que le permita a IMG proveer el servicio de transporte.
Las acciones de IEnova se hundieron 4.70%, a 73.17 pesos por título, en la Bolsa Mexicana de Valores. Los papales hilan dos días seguidos con caídas en sus cotizaciones./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTOporPUNTO