Los bonos de Petróleos Mexicanos (Pemex) se hundieron este martes a un mínimo histórico mientras una batalla por la participación del mercado entre Arabia Saudita y Rusia afecta los precios del petróleo y la demanda del crudo se reduce por el nuevo coronavirus.
- Los bonos estatales de la refinadora con vencimiento en 2027 cayeron 0.95 por ciento, a los 91.56 dólares, tras perder 11 por ciento el lunes. Los rendimientos aumentaron 21 puntos básicos a 8 por ciento, elevando el spread por encima de los bonos soberanos mexicanos de vencimiento similar a 478 puntos básicos, otro récord.
«Muchos inversionistas de mercados emergentes despertaron ayer con un escenario petrolero de 30 dólares por barril y están reduciendo el riesgo para el sector al deshacerse de uno de los bonos más fáciles de vender», dijo Roger Horn, estratega sénior de mercados emergentes de SMBC Nikko Securities America en Nueva York.
- El petróleo anotó su mayor desplome en casi tres décadas esta semana, después de que Arabia Saudita y Rusia prometieron extraer más crudo en una batalla por la participación en el mercado, justo cuando el coronavirus estimula la primera disminución de la demanda desde 2009.
«No es solo el hecho de que los precios serán más bajos y habrá más competencia en el mercado, sino que uno de sus principales compradores tendrá que reducir sus importaciones, dependiendo de cuánto tiempo continúe el impacto del virus», advirtió Ixchel Castro, gerenta de mercados de petróleo y refinación para América Latina en Wood Mackenzie Ltd.
«Si Arabia Saudita decide aumentar la producción, pronto habrá un suministro adicional de crudo mediano y pesado, por lo que impacta específicamente en una de las principales regiones donde México está exportando crudo en este momento», explicó la ejecutiva.
Los inversionistas se muestran escépticos con la política energética del presidente Andrés Manuel López Obrador, que incluye encargarle a Pemex la construcción de una refinería de 8 mil millones de dólares en su estado natal, Tabasco.
La petrolera está luchando por ser rentable mientras equilibra la necesidad de financiar el presupuesto del país, que depende de la empresa para casi una quinta parte de sus ingresos.
- La deuda de Pemex se ha disparado incluso en medio de la difícil producción de petróleo, que ha declinado todos los años desde 2004. Pese a un programa de perforación acelerado en un grupo de campos en tierra y en aguas poco profundas, la producción de Pemex se estancó en el cuarto trimestre del año pasado en 1.68 millones de barriles diarios, con pocas variaciones con respecto al trimestre anterior.
- Más del 80 por ciento de la producción de petróleo de México tiene un precio de equilibrio superior a 35 dólares por barril, lo que lo convierte en el productor latinoamericano más expuesto a la crisis del crudo, según Wood Mackenzie. Sin embargo, esto no explica la cobertura financiera que Pemex usa a menudo como seguro contra una recesión.
La cobertura, independiente a la de la Secretaría de Hacienda, generalmente protege a un tercio de su producción de la volatilidad de los precios.
Es demasiado pronto para decir cómo la producción de Pemex se verá afectada por la guerra de precios, dijo Castro.
«Lo primero que hay que tener en cuenta ahora es si habrá un impacto en los precios a corto plazo, si podemos ver una resolución rápida del acuerdo entre las partes o si regresamos a un mundo de menor precio para un escenario de precios más extendido», apuntó. «La primera decisión estratégica para Pemex es cómo enfocar su mercado de exportación»./EL FINANCIERO-PUNTOporPUNTO