Analistas de tres regiones del mundo consideraron que el recorte de 300,000 barriles diarios de su producción petrolera ofrecido por el gobierno estadounidense para compensar la cuota de México en el acuerdo entre naciones petroleras será una realidad pero no por negociaciones políticas con la industria del vecino del norte, sino por la declinación productiva de los próximos meses, que podría sacar del mercado hasta 1 millón de barriles de productores estadounidensehrairis a lo largo del 2020.
- En el foro desarrollado por el portal especializado Energy Intelligence, Carl Moccia, analista de las Américas, Sam Ghrairi, de Asia Pacífico, Rafiq Latta, de Oriente Medio, así como Abhi Rajendran y Jonh van Shaik, director de investigación y contenidos del portal, respectivamente, explicaron que la reunión que convocó este martes la Comisión Ferrocarrilera de Texas para determinar la situación de oferta de petróleo en el mayor estado productor del país, concluirá en el reconocimiento de la caída de la demanda y la producción para Estados Unidos, aunque tras siete horas de argumentaciones parezca complicado que se llegue a anuncios oficiales.
“La cobertura que se prometió hacia México es todavía posible sin que se transparente, basta revisar el intercambio que hay entre ambos países: de exportación de alrededor de 600,000 barriles diarios de petróleo e importación de por lo menos el mismo volumen de otros combustibles, desde México. Así, 300,000 barriles diarios parecen poco”, aseguró Jonh van Shaik
- En el mundo, caerá en alrededor de 29% o 7.7 millones de barriles diarios la demanda de energéticos y la proveeduría de los mismos durante el segundo y tercer trimestre del 2020, por el cambio de hábitos drástico al que se ha obligado a la población al suspender eventos masivos y de esparcimiento, detallaron.
Así, la contribución para aumentar los precios de los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y no alineados (OPEP+), de 9.7 millones de barriles como recorte productivo durante mayo y junio, y de los cuales México aportará 100,000 barriles diarios, más los alrededor de 3.7 millones de barriles de los países el G20, se sumarán a la caída en la producción norteamericana que será resultado del contexto y no de negociaciones.
Según Rafiq Latta, los descuentos que determinó Saudi Aramco para sus clientes petroleros en Asia, que fueron casi 10 veces superiores a los que ofrecerá durante mayo para los compradores en Estados Unidos, son a la vez una señal de que la producción estadounidense comenzó su caída.
Con ligeros aumentos en los precios internacionales tras el mayor acuerdo de recorte productivo en la historia asumido por los países de OPEP+, en que la mezcla mexicana de exportación ganó 3.7% o 62 centavos entre el jueves y el lunes al cotizarse en 17.16 dólares por barril, se espera que el precio del petróleo Brent cierre en 60 dólares por barril al concluir el año. Gracias a los acuerdos, llegará a 80 dólares por barril en 2026, pero comenzará su caída por el resto de la década, para situarse en el promedio del 2020 hasta el 2030, consideraron finalmente./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO