Carlos Romero Aranda, titular de la Procuraduría Fiscal de la Federación (PFF), lo afirma sin titubeo: el Servicio de Administración Tributaria (SAT), el ente encargado de la recaudación de impuestos, “era un simulador y un distractor” de la lucha contra la evasión fiscal vía la emisión de facturas falsas.
- Por ahora la autoridad tiene listadas a casi 10 mil empresas y personas que se dedican a dicha práctica, pero el universo de involucrados en la evasión fiscal mediante estas operaciones es más extenso, afirma en una entrevista con La Jornada.
- “Ir contra las factureras es realmente acabar con 70 por ciento de la corrupción en el país. ¿Por qué? Porque aquí encuentras esquemas de desvío de recursos públicos, de moches, de lavado de dinero, con esquemas de no pago de impuestos. Estos esquemas se hicieron para ponerle en la torre al país. Yo no entiendo la existencia de estos esquemas sin la participación de gente del SAT en sexenios anteriores. Estos esquemas eran protegidos desde el gobierno”, asegura.
Anualmente, alrededor de 500 mil millones de pesos eran evadidos por las empresas dedicadas a la emisión de facturas falsas, de acuerdo con Romero Aranda. La cifra, expone, resultó de un estudio realizado por la Procuraduría /LA JORNADA-PUNTOporPUNTO