La tensión comercial no cesa. El fin de semana, los gobiernos de Estados Unidos y Canadá se enfrascaron en una discusión diplomática que dejó ‘pendiendo de un hilo’ las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). En el marco de la cumbre del G-7 en La Malbaie, Canadá, el primer ministro de ese país Justin Trudeau, dijo que las medidas arancelarias impuestas por Estados Unidos eran injustas y que responderían con medidas de represalia. Las declaraciones se hicieron el sábado en conferencia de prensa, poco después de que Trump abordara su avión para dirigirse a Singapur a una reunión con el líder norcoreano Kim Jong-Un. En respuesta, el presidente estadounidense acusó en su cuenta de Twitter a Trudeau de hacer declaraciones falsas, y lo calificó de “deshonesto y débil”./EL FINANCIERO