Desde la creación de Pemex Logística a finales de 2015, los costos para reparar ductos dañados por el huachicol se dispararon a niveles no observados en años anteriores, de acuerdo con datos de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
- En 2016, primer año de operación de Pemex Logística, los costos para sellar los ductos por tomas clandestinas fue de 1,768 millones de pesos (mdp), y en 2017 se dispararon a 2, 591 mdp. De hecho, el gasto realizado el año pasado creció 406 por ciento, respecto al gasto promedio erogado de 2011 a 2016 que fue de 512 mdp.
- Según la ASF, el costo total que enfrentó la petrolera para reparar los ductos en el periodo 2011-2016 sumó tres mil 70 mdp, y más de la mitad de esos recursos, es decir 58 por ciento, se gastaron en ese último año.
- El dictamen de la Auditoría no reporta datos de 2017, pero un estudio del Instituto Belisario Domínguez (IBD), de la Cámara de Diputados, refiere que reparar una perforación cuesta hasta 250 mil pesos. Al multiplicar esa cifra por las 10 mil 363 tomas clandestinas que reportó Pemex en ese año, arroja un costo aproximado de dos mil 591 mdp, de acuerdo con cálculos realizados por este medio.
Los costos y el aumento en las tomas clandestinas “repercuten en la rentabilidad y sustentabilidad de la prestación del servicio de logística de gasolinas y diésel”, de acuerdo con la ASF.
- La infraestructura que corre por Veracruz, Oaxaca, Puebla, Nuevo León, Tamaulipas, Guanajuato, Aguascalientes, Jalisco, Tlaxcala, Hidalgo, Estado de México, Sinaloa, Sonora, Michoacán, Tabasco, Querétaro y la Ciudad de México, es la que ha sido más afectada por las tomas clandestinas, según la información de Pemex publicada en la Plataforma Nacional de Transparencia.
- El ducto con más tomas clandestinas es el que corre desde la refinería de Minatitlán, Veracruz, a la Terminal de Almacenamiento de Azcapotzalco, en la CDMX, según la petrolera.
- Además, reparar una toma puede tardar en promedio 24 horas, tiempo durante el cual se interrumpe el abasto a diversos centros de consumo, detalla el estudio del IBD. En el periodo 2011-2016, el número de tomas identificadas aumentó 394 por ciento, al pasar de mil 323 a seis mil 537, con un total acumulado de 17 mil 535 perforaciones, detalla la ASF.
La Gerencia de Gestión Técnica de Salvaguardia Estratégica, adscrita a la Subdirección de Salvaguardia Estratégica de Pemex Corporativo, informó a la ASF, que se debió a que se cancelaron programas y proyectos de seguridad por falta de ajustes presupuestales.
Pemex informó que los recursos humanos, materiales y financieros para combatir estratégica y frontalmente el robo de combustibles fueron insuficientes; “y se presume la existencia de algunos trabajadores de Pemex y autoridades de los tres órdenes de gobierno que participan en el mercado ilícito de la venta de combustibles, lo que genera pérdidas y pone en riesgo a las instalaciones productivas, a la población y al medio ambiente”, cita la ASF./ CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO