México se volvería en un socio menor en la relación trilateral con Estados Unidos y Canadá si se aprobara e implementara la reforma de ley Judicial promovida por AMLO, comenta Duncan Wood, Presidente y CEO del Pacific Council on International Policy, e indica que en dos décadas de estudiar la relación bilateral no recuerda un momento de desgaste como el que se vive hoy.
¿La oposición del PAN y del PRI prácticamente son inexistentes, por esa razón la voz de Estados Unidos es potente?
- En 2018, antes de la elección que ganó AMLO, muchos decían que las presiones vendrían de los mercados financieros y de Donald Trump. Vimos que hubo presión de Trump en el tema migratorio, pero en otros temas, nada. Trump no estuvo interesado en mejorar el ambiente de inversión en México. Durante el gobierno de Biden no habíamos escuchado críticas públicas en contra de AMLO; detrás del escenario sí hubo conversaciones difíciles entre los dos gobiernos, pero la migración se convirtió en capital político por parte de México para negociar con Estados Unidos.
Pero se acabó la paciencia de EU
La declaración de (Ken) Salazar (embajador de EU) y (Brian) Nichols (subsecretario de Estado), sobre los riesgos que representa la aprobación de la reforma Judicial, revelan que son momentos interesantes porque por fin el Gobierno de Estados Unidos está diciendo que “ya estamos llegando al límite de nuestra tolerancia; hemos respetado los procesos democráticos, y la verdad es que (AMLO) no nos ayudó lo suficiente, entonces ya nos tenemos que meter aquí”.
Ahora que EU ha manifestado públicamente su advertencia sobre la reforma, ¿hasta dónde llegará?
Estamos llegando a un año clave en 2026 (revisión del T-MEC). Durante el 2025 habrá mucha presión por parte del gobierno de EU al gobierno de Sheinbaum para que suavice un poquito la reforma, si se aprueba en septiembre; de cambar las reglas del juego para proteger a los inversionistas, para asegurar un campo de juego nivelado.
¿Y si la presidenta Sheinbaum no hace nada al respecto?
- Creo que veríamos un año muy difícil en 2026 durante el proceso de revisar el T- MEC; momento en el que escucharíamos voces de diferentes sectores de la economía y política de EU diciendo que México no está jugado de una manera justa con EU y Canadá. México se volvería un socio menor en la relación trilateral. Y es totalmente posible, casi pasó durante el Gobierno de Trump, donde haya dos relaciones bilaterales, México-EU y México-Canadá.
Estamos llegando al final del sexenio de AMLO, ¿fue tardía la reacción del embajador Salazar?
Valdría la pena entender lo que el embajador Salazar intentó hacer en México con su relación con AMLO. Reconoció que la manera de proteger los intereses norteamericanos en México sería desarrollando una relación personal y muy cercana con AMLO, y yo creo que para las empresas norteamericanas funcionó bastante bien. Él pudo propiciar reuniones en Palacio Nacional entre AMLO con inversionistas. Pero llegando al fin de la administración de AMLO tuvo que decir: “es mi momento, no voy a perder mucho con criticar a AMLO; no voy a perder con meterme un poco con la política mexicana, y tal vez es un momento de decir al público en México y en Washington que: “no he sido tan suavecito con el presidente AMLO”, como muchos lo criticamos.
¿Los empresarios mexicanos fallaron al no presionar a AMLO?
Los empresarios pueden hacer más, pero el problema es que tienden a ser muy cautelosos, son adversos al riesgo. Ahorita es el momento de mandar el mensaje, si no a AMLO, a Claudia Sheinbaum./Agencias-PUNTOporPUNTO