En México, las mujeres perciben 15 por ciento menos ingresos en un empleo en comparación con lo que los hombres ganan; es decir, la brecha en nuestro país es mayor en comparación con economías parecidas de la región de América Latina, como Brasil, donde la brecha es de 10 por ciento, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
- En promedio, el ingreso laboral de los hombres en el país oscila entre los 11 mil 490 pesos mexicanos, mientras que los ingresos de las mujeres promedia alrededor de los 9 mil 825 pesos al mes.
- “Si una mujer quisiera alcanzar el mismo ingreso promedio al año que un hombre, tendría que trabajar aproximadamente 61 días adicionales al año para obtenerlo”, indicó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), en el documento ¿Cómo cerrar la brecha salarial? Estrategias para erradicarla en México.
Así, México ocupa el lugar 119 entre las economías con mayor brecha salarial, de acuerdo con el Índice Global de Brecha de Género 2024 del Foro Económico Mundial, situación que no ha tenido cambios significativos en los últimos 20 años, pese a los esfuerzos que se han realizado en la materia.
- Según el Imco, los mayores avances en materia de igualdad de género en los últimos 10 años se han basado en que se tenga una mayor participación de las mujeres en el ámbito político; sin embargo, en términos de condiciones económicas aún hay un rezago importante.
- Ejemplo de ello es que en 2005, las mujeres percibían 20 por ciento menos ingresos, y 19 años después; es decir, para 2024 esta cifra se redujo a 15 por ciento. En 20 años la disminución de la brecha salarial fue de solamente 5.0 puntos porcentuales, “esto implica que por cada 100 pesos que un hombre percibe, una mujer recibe 85 pesos”.
El Imco sostiene que las mujeres al tener más horas de trabajo no remunerado como el trabajo del hogar y de cuidados reducen la posibilidad de tener tiempo para participar en la economía remunerada, ya que cifras del instituto refieren que en promedio dedican 42 horas de trabajo semanales en comparación con los hombres que sólo destinan 17 horas.
“Además de la baja participación económica de las mujeres en México, donde 46 por ciento tienen un empleo—muy por debajo del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que es de 67 por ciento—, las responsabilidades de cuidado impactan sus trayectorias profesionales, ya que recaen de manera desproporcionada sobre ellas”, añadió.
Incluso, aquellas mujeres que tienen una oportunidad de tener un trabajo remunerado, también se ven impedidas de reducir la brecha salarial, pues alrededor de 43 por ciento de la plantilla laboral mexicana está conformada por mujeres; no obstante, en cuanto se empiezan a tener cargos de dirección el porcentaje se reduce; por ejemplo, en cargos de dirección de áreas jurídicas sólo 23 por ciento son mujeres; en dirección de finanzas, esta cifra cae a 11 por ciento y en direcciones generales, solamente el 3.0 por ciento son del sexo femenino.
Actualmente, la brecha salarial entre hombres y mujeres es de sólo 8.0 por ciento entre los 20 y 29 años; sin embargo, la mayor diferencia entre ingresos es entre los 30 y 39 años; además, la diferencia entre percepción de ingresos también tiene relación con las mujeres que están empleadas en la informalidad y las que no.
- “El 55 por ciento de las mujeres trabaja en la informalidad, frente a 48 por ciento de los hombres. Esta situación restringe el acceso de las mujeres a seguridad social, certidumbre jurídica, prestaciones laborales y acceso a servicios de salud, además de implicar un ingreso 41 por ciento menor al de aquellas mujeres empleadas en la formalidad”, señaló el instituto.
- Si el país se divide por regiones, las entidades del sur tienen una menor brecha salarial, sólo 14 por ciento, 1.0 punto porcentual por debajo del dato nacional, pero no por mejores condiciones de empleo ni salarios, “se debe a que los salarios en general son más bajos que el promedio nacional, los salarios de los hombres se asemejan más a los de las mujeres, y existe una baja productividad en los sectores predominantes de la región”.
Los estados que se ubican en el centro del país tienen una brecha salarial de 19 por ciento; es decir, 4.0 puntos porcentuales más que el 15 por ciento a nivel nacional; mientras que, en el norte de México, la diferencia salarial de género es de 16 por ciento, a pesar de que los salarios mensuales para hombres y mujeres son superiores a los que perciben las personas de otras entidades.
El incremento de los salarios en la zona norte, 14 por ciento más para hombres y 12 por ciento para mujeres, tiene relación con que en ese territorio se han localizado empresas de alta productividad del sector formal, sin embargo, la brecha salarial sigue siendo más alta, 1.0 punto porcentual más que el nivel nacional.
El Imco estimó que, en los últimos 30 años, se presentaron 1 mil 225 iniciativas legislativas para que haya una mayor igualdad salarial; no obstante, 55 se enfocaron en disminuir la brecha salarial y de éstas, 30 se aprobaron, pero al menos 76 por ciento de ellas se lograron entre septiembre y diciembre de 2024: sin embargo, “hoy el país carece de mecanismos que garanticen el cierre de la brecha salarial”./Agencias-PUNTOporPUNTO
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