El Servicio de Administración Tributaria (SAT) y el gobierno federal que encabeza Andrés Manuel López Obrador, atendieron una de las muchas peticiones del sector empresarial, pero falta dotar de oxígeno a los negocios con medidas fiscales amplias, sostuvo Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
- Es aplaudible la medida gubernamental para diferir el plazo por 12 meses la declaración de impuestos de las personas físicas, sin embargo, debe ampliarse para las personas morales, acotó el dirigente patronal del país.
«Esta es la primera medida fiscal verdaderamente relevante implementada por el SAT, para enfrentar la crisis económica y sanitaria más grave de la historia contemporánea nacional», afirmó.
A través de un comunicado, De Hoyos destacó que en la «Coparmex hacemos un reconocimiento al Servicio de Administración Tributaria (SAT), al gobierno federal y al presidente Andrés Manuel López Obrador, por haber ampliado el plazo para la presentación de la declaración anual de las personas físicas hasta el próximo 30 de junio».
- Dicha medida fue solicitada por la propia Coparmex y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) desde hace varias semanas, al pedir que el SAT y el gobierno federal fueran solidarios con los contribuyentes de menores recursos y capacidad económica, conforme a la recomendación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y otros organismos internacionales.
No obstante, el presidente de Coparmex pugnó porque se amplíe el plazo para los pagos provisionales que llevan a cabo las personas morales mes con mes, lo que sería de gran ayuda para las empresas en el contexto de la crisis derivada de la pandemia./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO