Durante el tercer trimestre del año las exportaciones mexicanas de bienes y servicios se constituyeron como el componente más dinámico de la demanda agregada, al crecer 3.7% respecto del trimestre previo, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
- De julio a septiembre, la formación bruta de capital fijo (inversión privada), el consumo privado y el consumo de gobierno –los otros tres componentes de la demanda agregada– tuvieron variaciones de 1.3%, -0.4% y -2.3%, respectivamente.
- Del lado de la oferta agregada, el producto interno bruto (PIB) tuvo una contracción de 0.4%, mientras que las importaciones de bienes y servicios crecieron 2.2 por ciento.
Durante los primeros nueve meses del año las exportaciones de bienes y servicios crecieron 7.9% en comparación con el mismo lapso del 2020, cifra inferior al avance de 11.2% de la formación bruta de capital fijo y de 8.1% del consumo privado, ya que estos reglones se vieron favorecidos por una base comparativa más sencilla, pues padecieron más la crisis del Covid-19 en el 2020.
- El año pasado, el comercio exterior fue el componente de la demanda agregada en México de más rápida reactivación, luego del freno de la actividad económica en abril y mayo para prevenir una propagación más veloz del Covid-19.
Lo anterior fue favorecido por la implementación de transferencias monetarias del gobierno de los Estados Unidos a las familias, con el objetivo de paliar el aumento del desempleo. Estas medidas elevaron la capacidad de consumo de los hogares y México se benefició con el aumento de proveeduría de productos como electrónicos e insumos médicos.
Después del consumo de los hogares, el de exportaciones de bienes y servicios fue el componente de la demanda agregada con mayor contribución al crecimiento del PIB mexicano durante los primeros tres trimestres del 2021.
El consumo privado aportó 5.3 puntos de crecimiento, las exportaciones 2.9 puntos, seguidas de la formación bruta de capital fijo (2 puntos) y el consumo de gobierno (0.1 puntos); mientras que las importaciones restan 5.4 puntos.
- El saldo es un crecimiento del PIB de 6.1% de enero a septiembre en comparación del mismo lapso del 2020.
- Las exportaciones son, además, el segundo componente en tamaño de la demanda agregada, pues aportan 27.9%, en tanto que el consumo privado contribuye con 45.5%, según el cómputo de los primeros nueve meses del año.
Por su parte, la inversión privada aportó 14% y el consumo de gobierno, otro 8.5 por ciento.
Tras la puesta en vigencia del Tratado de Libre de Comercio de América del Norte (TLCAN) el comercio exterior y, en particular, el comercio con Estados Unidos, se convirtió en un componente protagónico de la economía mexicana, hecho que se perfila para subsistir, tras la actualización del protocolo de comercio con el Tratado México-Estados Unidos-Canadá, que entró en vigor en julio del año pasado./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO