El Fondo de Pensiones para el Bienestar que pretende crear el Gobierno para completar las pensiones de los trabajadores sólo podría alcanzar para este año y el siguiente, incluso para todo el siguiente sexenio, dijo Alejandra Macías, directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica y Presupuestario (CIEP).
- En su iniciativa de reforma constitucional, el presidente Andrés Manuel López Obrador propuso crear el Fondo de Pensiones para el Bienestar con un capital inicial de 64,619 millones de pesos, el cual provendría de diversas fuentes como los ingresos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado o lo recursos que se obtendrán de la desaparición de órganos autónomos.
Con los recursos del fondo, se complementarán las pensiones de los trabajadores que ganan el salario promedio de los trabajadores del Seguro Social (16,777 pesos al mes) o menos, para que puedan tener una tasa de reemplazo del 100%, es decir, que reciban la totalidad de su última salario una vez que se retiren.
- No obstante, la directiva del CIEP dijo que como las fuentes de ingresos para el fondo que se detallan en la iniciativa de reforma constitucional son de una sola vez, por lo que cuando se acabe ese dinero hay muchas dudas respecto a cómo se financiaría después.
- Dijo que de todas las iniciativas propuestas por el presidente, la más costosa sería la de garantizar atención médica y gratuita a los mexicanos, debido a que para ello sería necesario elevar el gasto en salud al 6% del Producto Interno Bruto (PIB), desde el 2.9% que se destina actualmente.
La directora del Centro enfatizó que sólo serán trabajadores del sistema de Afores que se retiren a partir de 2024 quienes podrán recibir el beneficio de la reforma que propone el presidente López Obrador. Como actualmente sólo se retiran 50,000 empleados al año, de ahí que el Fondo podría alcanzar hasta el siguiente sexenio.
Reforma fiscal es necesaria
Macías declaró que si bien es necesario realizar una reforma fiscal, ésta se debería de considerar no sólo la parte de cómo se van a incrementar los ingresos del gobierno federal, sino también revisar la parte del gasto.
“La reforma fiscal debe ser del lado de ingresos y del lado del gasto. Y no sólo es aumentar tasas de impuestos (nominales), sino que hay que incrementar las tasas efectivas (que son las que realmente se cobran a los contribuyentes y son menores a las nominales)”, afirmó.
Igualmente dijo que una reforma fiscal debería de considerar una revisión a las deducciones de impuestos e incluso considerar candados a los estímulos fiscales a las gasolinas.
Respecto a la parte del gasto, aseguró que se debe de revisar cómo controlar el gasto del Estado en pensiones, así como evaluar qué se va a hacer con Petróleos Mexicanos (Pemex), pues ya se le dan demasiados apoyos./Agencias-PUNTOporPUNTO