En septiembre pasado, las exportaciones mexicanas de automóviles cayeron 7.1% a 284,243 unidades, por lo que enviaron señales de alerta desde uno de los bastiones manufactureros del país, ya que hilaron dos meses de contracciones y tuvieron su peor dinámica para un mes de septiembre desde el 2009.
El descenso refleja el retroceso de 7.8% de los envíos a Estados Unidos -el principal mercado de los vehículos ensamblados en México-, donde se observó una caída de ventas internas debido a que este año se adelantó a agosto el fin de semana de ofertas automotrices del día del Trabajo a agosto, de modo que el comparativo de ventas de septiembre fue complicado.
- La más importante de las tendencias es la mayor venta de modelos SUV (sport utility vehicles, por sus siglas en inglés), camionetas pequeñas y medianas que han copado rápidamente el mercado estadounidense y que México produce, pero aún en menor cantidad que automóviles compactos y subcompactos./ EL ECONOMISTA