El peso acumuló cuatro semanas de retroceso, mientras la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró su primera ganancia semanal desde principios de julio, al término de una semana de agitación en los mercados, causada por el aumento de la tensión en la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
En operaciones al mayoreo el peso se apreció ayer seis centavos respecto del día previo y cerró en 19.39 por dólar. Sin embargo, en el balance semanal anotó un retroceso de seis centavos (0.31 por ciento). En ventanillas bancarias la moneda mexicana se mantuvo en 19.72 unidades frente a la divisa estadunidense, pero en la semana perdió 10 centavos.
- La depreciación del peso se concentró al comienzo de la semana, cuando se observó una salida de los inversores de los mercados de riesgo, debido al escalamiento de la guerra comercial entre China y Estados Unidos y la evidencia de que las negociaciones entre ambos países han fracasado, explicó Banco Base.
- Agregó que el tipo de cambio también subió a principios de la semana, en medio de la especulación sobre el inicio de una guerra de divisas, luego de que el Banco Popular de China permitió que el yuan se depreciara a niveles por arriba de siete por dólar, cotizando en valores no vistos desde 2008.
La BMV concluyó con una baja de 0.04 por ciento y quedó con 40 mil 421.28 puntos, en línea con el comportamiento en Wall Street y el resto de los mercados mundiales. Pero en la semana acumuló un rendimiento de 1.11 por ciento, con lo que terminó una racha bajista de cuatro semanas, en las que había perdido 7.90 por ciento.
El mandatario estadunidense volvió a agitar los mercados este viernes, tras declarar que Estados Unidos continúa las negociaciones comerciales con China, pero que no se prevé un acuerdo por el momento. Incluso, consideró la cancelación de la ronda de negociaciones que ambos países tienen prevista para septiembre.
- Tras el cierre de los mercados el yen japonés y el franco suizo se apreciaron, ya que los inversionistas buscaron monedas de refugio, ante las preocupaciones por la guerra comercial entre las mayores economías globales, la incertidumbre política en Italia y débiles datos económicos a escala mundial.
El Fondo Monetario Internacional indicó que una remontada en los aranceles por la guerra comercial que mantienen Washington y Pekín puede afectar considerablemente el crecimiento económico chino. Agregó que éste podría necesitar más estímulo fiscal si la tensión comercial con Estados Unidos empeora, lo que pone en riesgo la estabilidad económica y financiera./LA JORNADA-PUNTOporPUNTO