Guerrero, Chiapas, Nayarit, Oaxaca y Michoacán reportan los mayores índices de trabajo infantil en nuestro país, ya que presentan altos niveles de pobreza y bajo acceso a la educación, según la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2022 del Inegi.
El trabajo infantil se concentra en el sector agropecuario (33.0 por ciento), seguido por servicios (23.2 por ciento) y comercio (21.5 por ciento); además, 37.6 por ciento de los menores no recibió ingresos, y 47.9 por ciento percibió hasta un salario mínimo, de acuerdo con el sondeo.
- En Oaxaca, los municipios de San Agustín Tlacotepec, registra 57.8 por ciento y San Simón Zahuatlán, 38.5 por ciento de niños de entre 12 y 17 años que ya laboran. En Guerrero, Acapulco reporta más de 50 menores, de entre siete y 17 años, en zonas como la Costera Miguel Alemán y el Zócalo; Chiapas presenta una tasa de 13.5 por ciento de trabajo infantil en ocupaciones no permitidas. Nayarit ha sido identificado como la tercera entidad con mayor porcentaje.
Muchos de los municipios son rurales, donde es común que los pequeños vayan al campo desde temprana edad.
En Puebla, que ocupa el sexto lugar en número de infantes productivos, señalaron a la organización no gubernamental (ONG) Fundación ONR por presuntamente explotar a menores.
- De acuerdo con el diputado local por Morena en Puebla, Roberto Zataráin, la ONG los engancha a través de redes sociales o recomendaciones de boca en boca, con el fin de que recauden dinero para supuestas acciones en contra del maltrato animal.
- Las prácticas culturales normalizan el trabajo infantil, especialmente en agricultura y artesanía; además, la falta de escuelas cercanas y la necesidad de apoyar económicamente a la familia hacen que muchos abandonen sus estudios.
Se ocupan en el sector informal, donde no hay inspecciones ni garantías legales; lo que permite que laboren en campos agrícolas, tianguis, transporte, servicios y hasta minería artesanal, sin consecuencias para los empleadores./Agencias-PUNTOporPUNTO