México corre el riesgo de perder su prestigio como uno de los principales países cafetaleros debido a que no ha recuperado los niveles de producción previos a que la roya (un hongo) atacara los cultivos, el incremento de más de mil por ciento en las importaciones del grano en menos de dos décadas y la sustitución de la variedad arábiga por la robusta, más resistente, pero de menor calidad, impulsada por el gobierno federal para renovar los cafetales y enfrentar la enfermedad, advirtieron organizaciones de caficultores. La Sagarpa considera que el café es “un cultivo estratégico para México”, pero las importaciones subieron mil 103 por ciento en menos de 20 años, al pasar de 9 millones 168 mil dólares en el año 2000 a 110 millones 374 mil dólares en 2018, según cifras del Banco de México./ LA JORNADA