El déficit de la cuenta corriente en todo el año 2018 ascendió a 22,186 millones de dólares, una cifra que se amplió desde los 19,401 millones que se registraron en el año previo, informó el Banco de México.
- Como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), el déficit de la cuenta corriente fue equivalente a 1.8 puntos del Producto, con lo que se observa un repunte desde 1.7% del PIB registrado en el 2017.
- Este déficit puede financiarse cómodamente con una cuenta de capital anclada en flujos de inversión extranjera, que en todo el año sumaron 24,746 millones de dólares, pero se mantiene como una fuente de vulnerabilidad por estar principalmente anclada en capitales del exterior, alerta desde Nueva York, Alberto Ramos, economista para América Latina en Goldman Sachs.
- Esta inversión directa resulta de la diferencia entre 31,604 millones captados en México (inversión productiva doméstica) y una desinversión del exterior de 6,858 millones de dólares.
- En el detalle de la información divulgada por Banxico, se observa que de los 24,746 millones de dólares de inversión directa, sólo 11,468 millones corresponden a nuevas inversiones mientras el resto son reinversiones y cuentas entre compañías.
De acuerdo con el director del Departamento de Investigación Económica del think tank veracruzano Saver, Luis Pérez Lezama, la incertidumbre por un entorno externo adverso, dirigido por los desacuerdos comerciales de Estados Unidos con China, la desaceleración mundial y la adaptación local a las políticas económicas del gobierno de AMLO limitan la confianza de los industriales para traer sus recursos frescos al país.
Atractivas tasas de interés
En el transcurso del año, el mercado mexicano captó 14,824 millones de dólares en inversión de cartera. La mitad de estos capitales, 7,235 ingresaron en el último trimestre del año, atraídos por el premio de 8.25% que mantiene a México como el más atractivo de los mercados emergentes, después de Argentina y Turquía.
- De acuerdo con Luis Pérez Lezama, este comportamiento es resultado del ambiente global de alta incertidumbre y de la búsqueda de rendimiento de los inversionistas.
- La información del Banco de México muestra que los inversionistas privilegiaron la toma de instrumentos del sector público, que en todo el año ascendió a 10,683 millones de dólares, de los que 10,570 fueron emitidos en el exterior.
- En un acercamiento trimestral, se observa que entre octubre y diciembre de este año, los inversionistas tomaron 418 millones de dólares de valores del sector público y 1,879 millones emitidos fuera del país.
- La situación es diferente para los títulos emitidos por el sector privado, pues por segundo trimestre consecutivo registraron una desinversión que en el conglomerado anual llegó a 1,184 millones de dólares.
Inversiones mexicanas salen
- La información del Banco de México precisa que entre octubre y diciembre, que incluye dos meses del periodo de transición entre el triunfo de Andrés Manuel López Obrador y su primer mes como presidente constitucional, inversionistas locales llevaron 1,125 millones de dólares al exterior. Esto, pese al premio otorgado en México en moneda local.
- Así, el cuarto trimestre del 2018 se convirtió en uno de los tres del año donde los inversionistas domésticos prefirieron ampliar el éxodo, lo que significó una salida de recursos de 9,527 millones de dólares en todo el año./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO