Aunque Nuevo León y Coahuila serían 2 de las entidades más afectadas con el pago de aranceles a la importación de acero y aluminio en el mercado de Estados Unidos que decretó a partir del próximo 12 de marzo el Presidente de ese país, Donald Trump, su impacto será «limitado» en la economía mexicana, anticiparon analistas del grupo financiero BBVA.
«El monto de las exportaciones de acero y aluminio de los capítulos 72, 73 y 76 al 2024 equivale a sólo el 1 por ciento del total de las exportaciones de México y a 0.26 por ciento del PIB, por lo que su impacto será limitado».
- Pero el impacto para Estados Unidos sería mayor, agrega el análisis, como ya lo fue en la pasada ronda de aranceles que en el 2019 impuso Trump a las exportaciones de acero y aluminio mexicanas y canadienses hacia su País.
- De acuerdo al Peterson Institute for International Economics, esta primera ronda de aranceles incrementó el precio de los productos de acero en casi 9 por ciento a los estadounidenses.
En efecto, se crearon empleos en esta industria doméstica del acero (aproximadamente 8,700), pero por cada empleo generado, se estima que los usuarios del acero pagaron 650 mil dólares adicionales.
- El análisis indica que al tratarse de un arancel que aplicará a todos los países, la competitividad relativa de México frente a terceras naciones no sería afectada.
- Aunque las Entidades que más resentirían el impacto del arancel en México, por ser las mayores exportadoras de acero y aluminio, serían en primer lugar Nuevo León, que exporta el 35.6 por ciento; seguido de Coahuila, con el 13 por ciento; Baja California, con 8.6 por ciento, y Tamaulipas, con el 7.9 por ciento.
- El argumento en que se basa la medida se centra en el déficit comercial de Estados Unidos en este sector, así como en el crecimiento de la capacidad instalada en otros países.
«En el caso de México está justificación no aplica, ya que el balance es superavitario a favor de Estados Unidos», advierte el análisis de BBVA.
Aunque en Estados Unidos existe la preocupación, que inició en la Administración Biden, de que parte del acero que México les exporta pudiera ser de origen chino.
«En el caso de México y Canadá, desde julio 2018 aplicaban reglas bajo la Sección 232 obligando a declarar ante el US Custom and Border Protection que el acero se había fundido y vertido en Norteamérica para evitar aranceles del 25 por ciento y declarar que el aluminio en materia prima no proviniera de China, Rusia, Bielorrusia o Irán para evitar del 10 por ciento», añade.
Señala que los principales países proveedores de acero y aluminio para Estados Unidos en el 2024 fueron, en orden de importancia, Canadá, México, Corea del Sur, Brasil y China representando el 58.7 por ciento; mientras que los principales estados importadores son Texas, Illinois, California y Michigan, con una participación del 42 por ciento en el 2024./Agencias-PUNTOporPUNTO