Elevar los salarios de los trabajadores del sector automotor en México restará competitividad a la industria que se caracterizaba por las bajas remuneraciones, de acuerdo a expertos. El entendimiento al que llegaron los gobiernos de Estados Unidos y México el lunes pasado en el marco de la renegociación del TLCAN modifica las reglas de origen para la fabricación de automóviles en ambos países, por lo que el contenido regional pasó de 65 a 75 por ciento. Sin embargo, el problema para México es que la nueva normatividad señala que 40 por ciento en autos ligeros y 45 por ciento en pick ups deben tener componentes manufacturados por trabajadores que ganen más de 16 dólares por hora. De acuerdo con el director general de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores (Anierm), Enrique Zavala Gallegos, la industria manufacturera nacional no cumple con el requisito porque paga en promedio 3.5 dólares por hora./LA JORNADA