Además del cambio climático que ocurre a nivel global, existen fenómenos locales como las islas de calor que afectan a las grandes metrópolis, donde la urbanización, sobrepoblación, asfalto, densidad de automóviles y crecientes edificios genera un microambiente que se calienta. Estas se producen en zonas urbanas que experimentan temperaturas más altas que las regiones circundantes debido a la actividad humana.
- “Se convierte en relevantes porque ocurre en las ciudades donde habitan más del 70% de la población, en el caso de México”, alertó Francisco Estrada Porrúa, coordinador del programa de Investigación en Cambio Climático de la UNAM.
- Un estudio realizado en esta entidad académica revela que estos incrementos locales han llegado hasta tres o cuatro grados Celsius en algunas zonas de la Ciudad de México, como la oriente y las regiones donde se asientan las nuevas urbanizaciones.
En conferencia de prensa: “Caracterizando la isla de calor en superficie de la Zona Metropolitana del Valle de México”, el investigador dijo que entre los principales determinantes del clima urbano, además del cambio climático, están los factores geográficos (longitud y altura), los procesos de variabilidad natural, así como los efectos de contaminantes en clima regional y local, por ejemplo, los aerosoles y el carbono negro.
- También afectan el reemplazo de paisajes naturales por urbanos, que implican cambio de balance de energía en superficie y propiciar el uso de materiales y estructura más densos, con gran capacidad térmica y calor, producto de actividades antropogénicas.
Islas de calor afectan grandes urbes
Estrada Porrúa manifestó que las islas de calor son un fenómeno preocupante que impacta a mil 692 grandes ciudades del planeta, donde habita más del 50% de la población.
- En ellas, explicó, se genera 80% del producto interno bruto de las naciones y por ello son las mayores concentradoras de seres humanos.
- A estos efectos, acotó, hay que añadir que existen sinergias entre el calentamiento local y el global que pueden incrementar aún más la temperatura local.
- “En el caso de la Ciudad de México, si el aumento promedio por islas de calor es de tres grados, puede subir a cuatro por efecto del calentamiento global”, precisó.
Para mitigarlas, el investigador de la UNAM propuso modificar los materiales de recubrimiento de las azoteas, así como utilizar techos blancos y suelos frescos que no caliente más las zonas locales.
“Este tipo de techos son una opción para elevar el albedo de las ciudades, es decir, el porcentaje de radiación que cualquier superficie refleja respecto a la radiación que incide sobre ella, De esta manera se reduce el fenómeno de isla de calor. Impulsados en edificaciones nuevas y existentes, produce un enfriamiento de menos tres grados Celsius”.
“Así como norma estas medidas en reglamentos estatales de construcción y leyes de cambio climático, además de fomentar la expansión y recuperación de áreas verdes, porque así se reduce la temperatura local entre uno y cinco grados Celsius por evapotranspiración y efecto de sombra” concluyó el coordinador del programa de Investigación en Cambio Climático de la UNAM.
Aumentará calor y reducirá lluvia en la CDMX
En la Ciudad de México (CDMX), los efectos del cambio climático provocarán que hacia 2050 la temperatura se eleve alrededor de dos centígrados y para 2100 el incremento de calor sea de hasta 4.9 grados Celsius, de acuerdo con datos de la UNAM y la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil.
Durante su participación en la conferencia magistral Retrospectiva a 7 años del Marco de Sendai en México: ¿Qué hemos aprendido y hacia dónde vamos? como parte del Quinto Congreso Internacional de Gestión Integral de Riesgos y Resiliencia en Ciudades, Myriam Urzúa, titular de la SGIRPC, alertó que la proyección hacia 2100 también indica que las lluvias podrían reducirse 7.6 por ciento, exacerbando la sequía en el Valle de México.
Los cambios en las condiciones climatológicas incrementarán la ocurrencia de fenómenos extremos como sequías y lluvias intensas, lo que puede aumentar, y lo sabemos muchos que estamos aquí, la vulnerabilidad de la población ante desastres”, dijo Urzúa.
- Desde 2022, la UNAM, a través de un artículo publicado en su Gaceta, alertó que proyecciones de sus expertos estimaban que la temperatura aumentaría 1.5 grados Celsius para inicios de 2030 y dos grados para 2050.
- Urzúa indicó que las proyecciones más recientes indican que para 2100 la temperatura en la Ciudad de México se elevará 4.9 grados Celsius. El récord de máxima temperatura en la Ciudad de México es de 37 grados y se registró en 1988, 2001 y 2022.
Cambio climático en CDMX
Ante este escenario Urzúa consideró que es necesario destinar mayor inversión a las estrategias de prevención, dijo que actualmente, los presupuestos están destinados en 94 por ciento para acciones de reconstrucción y sólo el 5.2 por ciento a la prevención.
- Mayor inversión en las estrategias de prevención, según el comité de asistencia para el desarrollo de la OCDE, del financiamiento que se destinó entre 2011 y 2022 a 34 países en desarrollo para fines relacionados con desastres sólo el 5.2 por ciento se dirigió hacia la reducción de riesgos de desastres y a la preparación y todo el resto, es decir, el 94.8 por ciento a la reconstrucción y el socorro en casos de desastre”, expresó.
Urzúa indicó que es necesario realizar más investigación interinstitucional e interdisciplinaria sobre los efectos del cambio climático en la Ciudad de México.
¿Por qué hace tanto calor en CDMX?
El cambio climático, la variabilidad natural y la estacionalidad también juegan un papel importante respecto a las temperaturas extremas.
- El doctor Francisco Estrada, coordinador del Programa de Administración de Cambio Climático de la UNAM, detalla que, por ejemplo, el cambio climático provocará que estos eventos extremos de temperatura se vuelvan más frecuentes, además, conforme aumente la temperatura, “vamos alcanzando nuevos niveles de temperaturas extremas”. Lo explica de la siguiente manera:
“Es como si jugaran un dado y yo lo voy cargando para que salgan más 6. Antes de que yo cargara el dado, saldrán 6 de vez en cuando, pero con cambio climático vamos cargando el dado y nos van apareciendo de manera más frecuente los 6, y ahora se va volviendo normal tener muchos 6. Hay cuestiones de variabilidad natural que permiten que de vez en cuando ocurran estas ondas de calor, pero el cambio climático está cargando los dados para que ocurran este tipo de eventos“. explicó en entrevista con CDMX Secreta.
Adicionalmente este año tenemos presente al fenómeno del Niño, el cual se está caracterizando por altas temperaturas:
- “El cambio climático no es un problema para las décadas siguientes o nuevas generaciones, ya es un problema y este tipo de eventos se van a volver cada vez más frecuentes”, explica.
- Respecto a la Ciudad de México hay muchas cosas que nos juegan en contra, comenzando por la isla de calor, lo cual provoca cambio climático local.
- Con la urbanización y la proliferación de edificios tenemos más superficies que absorben la energía del Sol y la vuelven a emitir, además se generan cañones urbanos, debido a que las grandes construcciones no permiten que el aire circule de manera libre.
De acuerdo con el doctor Francisco Estrada, en los últimos 100 años la temperatura en la Ciudad de México ha aumentado 4 grados centígrados, de los cuales solo uno se deben al cambio climático, mientras que el resto es provocado por la isla de calor.
¿Cuál es la zona de CDMX donde hace más calor?
Aunque no lo parezca, la Ciudad de México tiene por lo menos cuatro tipo de climas, por lo que no encontraremos las mismas temperaturas en todas las alcaldías.
El especialista detalla que la parte más calurosa es del centro al oriente; mientras que el efecto de la isla de calor se presenta principalmente en la Venustiano Carranza, Iztapalapa y la Gustavo A. Madero.
De hecho durante esta onda de calor las temperaturas más altas se han registrado en la parte norte oriente, justo en la sierra de Guadalupe en la Gustavo A. Madero; así lo detalló Rafael Bernardo Carmona, Coordinador General del Sistema de Aguas de la Ciudad de México./Agencias-PUNTOporPUNTO