Ante las recurrentes condiciones de sequía que se registran en México, especialmente en la zona norte, y el crecimiento acelerado de diversas zonas metropolitanas, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportan que de las 210 presas que monitorea tiene un nivel de 60% de almacenaje del vital liquido.
En su más reciente reporte del registro de almacenamiento en las presas indica que 96 se encuentran por arriba del 50%, 30 en 20% y 12 presas con niveles por debajo de 20% su capacidad.
Las presas con mayor porcentaje de almacenamiento a la fecha son La Vega (Jalisco) e Ing. Luis Laureano León (Chihuahua), ambas con más del 100%, mientras que San Ildefonso (Querétaro) y Copándaro (Michoacán) presentan los porcentajes más bajos de almacenamiento con menos del 15%. Históricamente, el porcentaje de almacenamiento de ambas presas no rebasa el 50% en los últimos 5 años.
Son varios estados en las que sus presas se encuentran en niveles muy bajos de su capacidad, son:
- Morelos
- Colima
- Baja California
- San Luis Potosí
- Querétaro
- Tlaxcala
- Puebla
- Aguascalientes
- Estado de México
La Conagua estima que este 2023 el almacenamiento de las tres presas que alimentan el Sistema Cutzamala tiene un acumulado de 386 millones de metros cúbicos, equivalente a 49.4% de su capacidad, lo cual representa un déficit de 23.5% respecto del histórico de estas fechas.
Conagua aplica acciones para afrontar periodos de sequía
En el marco del Día Mundial del Agua, México ocupa el lugar 24 a nivel mundial con mayor estrés hídrico, en una lista de 164 países que elabora el World Resource Institute. Datos del INEGI señalan que el 76% de la agua del país se utiliza en agricultura; 14% para abastecimiento público; 5% en termoeléctricas, y 5% en la industria
Humberto Marengo, el subdirector general técnico de Conagua, informó que la dependencia desarrolla proyectos de largo plazo que permita avanzar hacia la seguridad hídrica de las poblaciones.
El funcionario dijo que es deseable que los tres órdenes de gobierno impulsen la mejora en la medición del consumo de agua a nivel urbano, reducir el uso del agua en actividades no esenciales y las tomas clandestinas.
Así como optimizar las políticas de abastecimiento municipales, hacer más eficiente el riego y abasto de agua mediante mejora a la infraestructura y la implementación de dispositivos más eficientes, promover la reutilización del agua tratada o proveniente del riego, en lo posible, buscar nuevas fuentes de agua, como la desalinización o el rehusó de aguas residuales tratadas.
“Para afrontar la crisis de sequía se requiere la suma de esfuerzos de los sectores gubernamentales, académico y social, a fin de establecer mecanismos más robustos de planeación y uso eficiente del agua, pues su cuidado y conservación es una tarea que compete y beneficia a todos”, expresó el funcionario./Agencias-PUNTOporPUNTO