El 2 de junio se implementará el voto electrónico en 44 casillas especiales en Ciudad de México, 27 de Nuevo León, además de las 23 casillas que se instalarán en consulados de México en ciudades de Estados Unidos, Canadá, Francia y España para el voto exterior.
- En la Ciudad de México habrá tres equipos en cada una de las 44 casillas especiales, donde las personas en tránsito podrán votar para la Presidencia de la República, Jefatura de Gobierno, Senadurias y una diputación migrante, entre otros.
- En un evento que se llevó a cabo en la Junta Distrital 06 del INE, consejeros del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) y funcionarios del INE hicieron una presentación del funcionamiento de la urna V.7.0, que fue diseñada por técnicos del Instituto Nacional Electoral.
Patricia Avendaño, presidenta del IECM, y otros consejeros electorales, hicieron un ejercicio de voto electrónico para mostrar que se trata de un acto transparente, sencillo y seguro.
Por su parte, Luisa Flores Huerta, vocal ejecutiva del INE en la Ciudad de México, indicó que aunque el voto electrónico será una normalidad en el futuro, aún no es permitido por ley en nuestro país que se implemente en todas las casillas básicas y contiguas, sólo en las especiales.
“Todo mundo nos dice: ¿Ya las vamos a tener en las casillas, verdad, las ordinarias? Les decimos: todavía no llega ese momento (…) pero ya hemos implementado varias veces el ejercicio”, destacó.
Daniel Flores Gongora, directora de Estadística del INE, mencionó que la urna electrónica garantiza la secrecía del voto, la confiabilidad del cómputo y los resultados.
- Además, indicó que no es la primera vez que se implementará el voto electrónico como programa piloto, pues se ha hecho en los últimos cuatro procesos elecciones locales del 2019 a 2023 en Hidalgo, Coahuila, Jalisco, Aguascalientes, el Estado de México y Tamaulipas.
- Argumentó que implementar el voto electrónico trae beneficios en costo, disponibilidad inmediata de los resultados, simplificación de operación electoral, automatización del proceso de escrutinio y cómputo, y resultados libres de errores, lo que a su vez impide la anulación innecesaria de votos.
“Aquí es evidente que uno de los grandes beneficios que ofrece esa modalidad de votación respecto a la votación tradicional impresa, tiene que ver con la reducción muy significativa de los tiempos para poder contar los resultados de la votación (…) Se atiende una mayor cantidad de electores. Se trata de resultados libres de errores, al menos libres de errores humanos, que es también una de las causales más frecuentes que se traducen en recuentos (de votos) posteriores”, mencionó./CONGRESO-PUNTOporPUNTO