Una de las megaobras más importantes para la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, la refinería de Dos Bocas, en Tabasco, se encuentra una vez en medio de la polémica después de que miembros del Partido Revolucionario Institucional (PRI) pidieran a la secretaria de Energía, Rocío Nahle, transparente el proyecto, pues alegaron que este se ha mantenido en la opacidad.
- La bancada del tricolor en la Cámara de Diputados presentó un punto de acuerdo, a través del cual buscan que la funcionaria federal instale un grupo de trabajo con la Comisión de Energía para que se le dé seguimiento operativo y financiero a la construcción de esta refinería.
La legisladora Soraya Pérez Munguía, en representación de la fracción parlamentaria del PRI, señaló que en un inicio, la obra estaba presupuestada para costar 160,000 millones de pesos, además de que no más de tres años en construirse y produciría 123,000 empleados.
No obstante, en la actualidad, esa previsiones se superaron de manera importante. Pérez Munguía resaltó que el costo ha aumentado debido a factores como la depreciación del peso frente al dólar en los últimos 24 meses, así como el hecho de que la tecnología y equipos son importados, algo que también ha reconocido la propia secretaria Nahle.
- La priista, según el mismo medio de comunicación, también recurrió a una advertencia realizada por el Instituto Mexicano del Petróleo, el cual indicó que la nueva refinería tendría un costo de USD 5,822 millones por encima de lo previsto.
- En su análisis, el mismo organismo apuntó que el nuevo monto para la construcción de la refinería se financiaría a partir de dos escenarios posibles. El primero implicaba una inversión del 100% basada en recursos públicos, mientras que el segundo se fundamentaba en una inversión pública del 30% y lo demás a partir de otras fuentes de financiamiento.
Cabe recordar que la semana pasada se dio a conocer que la Kellogg Brown & Root (KBR), encargada de los paquetes 4 y 6 de la refinería de Dos Bocas, abandonó la fase dos del proyecto porque se excedió el presupuesto originalmente programado por la Secretaría de Energía (Sener).
- La firma presupuestó más del doble de lo proyectado por la dependencia: los costos pasaron de USD 2.4 millones a 4.7 millones, por lo cual se rebasaron los límites impuestos por la Sener.
- De acuerdo con fuentes cercanas a la obra, cada contratista involucrado desarrolla el proyecto en dos fases. La primera consiste en el desarrollo de ingeniería y la segunda en la compra de equipos, materiales, y la construcción. Sin embargo, en este caso se acordó dejar el proyecto en la primera fase.
Otra de las polémicas de megaobra en tiempos recientes ha sido en relación a las fuertes lluvias, las cuales habrían provocado importantes inundaciones en la zona donde se construye, de acuerdo con unas fotografías que se reprodujeron a través de diversos medios de comunicación.
Sin embargo, el periodista Lester Wilson realizó un sobrevuelo de la zona para verificar si las fotografías correspondían con la realidad. Fue entonces cuando dio a conocer que si bien el lugar presentaba encharcamientos, no se trataba de las alarmantes imágenes que circulaban en redes.
- Por su parte, la Sener desmintió que la obra estuviera inundada. Además, destacó que con el nivel de lluvias que ha presentado el país durante los últimos días, cualquier construcción sufriría encharcamientos en ciertos puntos.
La refinería en Dos Bocas es una de las apuestas más fuertes del actual gobierno de México. De acuerdo con el portal oficial del proyecto el objetivo es “incrementar la elaboración de productos de mayor valor agregado en el país, cuidar la balanza comercial e impulsar el desarrollo económico y social del sureste mexicano”./Congreso-PUNTOporPUNTO