Ante la propuesta de la senadora Soledad Luévano Cantú (Morena) de reformar la Constitución para eliminar la separación entre las iglesias y el Estado, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que esa posibilidad no ayudaría al país y, al contrario, generaría confrontación. Por tanto, consideró que el tema no debe tocarse.
Al mismo tiempo aclaró que todos los legisladores son autónomos y tienen derecho a proponer los temas de su interés, pero la Presidencia de la República no está interesada en promover un cambio de esa naturaleza.
- La laicidad del Estado –sostuvo– quedó resuelta desde hace más de siglo y medio dentro de una confrontación que provocó hasta una invasión extranjera, así que no nos metamos en ese terreno.
- A Dios lo que es Dios y al César lo que es del César, expresó durante la conferencia de prensa matutina de ayer.
- “Yo creo que todo mundo, la mayoría de los mexicanos, está de acuerdo en que prevalezca el Estado laico, lo que establece la Constitución.
Y el Estado laico, también hay que decirlo, significa garantizar la libertad religiosa, porque a veces se piensa que el Estado laico es un principio antirreligoso. No, es garantizar las libertades y garantizar las libertades de creyentes y de no creyentes, nada más que no hay que relacionar los asuntos de las iglesias con lo que corresponde al Estado, expuso.
El mandatario aclaró que la propuesta de la senadora zacatecana es a título personal.
Detalló que las modificaciones constitucionales que sí promoverá su gobierno será el derecho a la pensión para adultos mayores, a niños con discapacidad y a recibir becas para estudiar cuando no se tengan los recursos económicos suficientes./LA JORNADA-PUNTOporPUNTO