Una gran tormenta solar amenaza con provocar este fin de semana apagones, perturbar los sistemas de navegación y desactivar las radios de alta frecuencia en todo el mundo. Esta es la primera vez desde enero de 2005 que el Centro de Predicción del Clima Espacial de Estados Unidos emite una alerta de tormenta geomagnética G4 (la segunda más alta en una escala de cinco), cuando múltiples ondas de energía solar azotan el planeta.
- El orgaismo prevé que cinco erupciones de material de la atmósfera solar lleguen a partir de este viernes 10 de mayo por la noche y persistan hasta el domingo. “Las alertas a este nivel son muy inusuales”, explicó el Centro de Predicción del Clima Espacial.
Al menos siete eyecciones de masa coronal (CME) dirigidas a la Tierra están en tránsito» procedentes de una región de manchas solares en plena actividad, coincidiendo con el pico del ciclo solar, precisó la NOAA (Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica) de Estados Unidos.
La NOAA señala que la probabilidad de riesgo de tormenta geomagnética continue durante el fin de semana, «aunque el momento exacto sigue siendo algo incierto».
Como resultado de un evento clasificado como G4 en una escala de 5 como el previsto, pueden registrarse efectos en las comunicaciones de Alta Frecuencia (HF), la red GPS, centrales eléctricas (control de voltaje), naves espaciales, navegación por satélite, y otras tecnologías.
La NOAA afirmó que «se ha notificado a los operadores de infraestructuras críticas».
Primer aviso de este tipo desde 2005
A modo de contexto, solo tres tormentas geomagnéticas severas han sido observadas en lo que va de este ciclo solar que comenzó en 2019; la último fue un breve suceso en marzo de 2023. Sin embargo, este es el primer aviso de nivel G4 emitido por el SWPC desde 2005.
- El último evento extremo (G5) ocurrió con las Tormentas de Halloween en 2003. La causa del riesgo de tormenta geomagnética estriba en un gran y complejo cúmulo de manchas solares en la región solar 3664, que tiene 16 veces el diámetro de la Tierra, donde se sigue esperando más actividad en medio del actual máximo de actividad del ciclo solar.
El Sol ha intensificado la emisión de poderosas llamaradas en la última semana. Las erupciones solares son poderosas explosiones de energía. Las llamaradas y erupciones solares pueden afectar las comunicaciones por radio, las redes de energía eléctrica, las señales de navegación y representar riesgos para las naves espaciales y los astronautas.
¿Qué puede pasar?
Si bien las personas estarán protegidas por el campo magnético de la Tierra, las redes eléctricas no preparadas podrían sufrir interrupciones, las tuberías podrían cargarse de corriente y las naves espaciales podrían desviarse de su curso. La última vez que la Tierra fue azotada por una tormenta G5 —la peor de la escala— fue en octubre de 2003, provocando cortes de energía en Suecia y daños a transformadores en Sudáfrica.
¿Es el fin?
La verdadera potencia de la tormenta se conocerá entre 60 y 90 minutos antes de que golpee la Tierra, cuando los satélites midan las ráfagas de energía que se aproximan.
- Según la Oficina Meteorológica del Reino Unido, es posible que en grandes zonas de Asia, Europa y Norteamérica se vea una aurora boreal durante la noche donde los cielos sean lo suficientemente oscuros y despejados. Es probable que también sea visible en todo el Reino Unido.
Además, es probable que los vuelos transpolares entre Europa, Asia y Norteamérica sean desviados para evitar una mayor exposición a la radiación de pasajeros y tripulaciones.
El culpable es un cúmulo de manchas solares visible en el lado derecho del disco solar que es 16 veces más ancho que la Tierra. El sol, que recorre un ciclo de 11 años en el que el número de manchas aumenta y disminuye, se acerca al pico del actual que comenzó en diciembre de 2019./Agencias-PUNTOporPUNTO