El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, José Ramón Amieva, consideró como urgente la demolición del Colegio Rebsámen, donde fallecieron 26 personas, entre ellos 19 niños a consecuencia del sismo que afectó la capital el 19 de septiembre. El viernes, padres de familia de los infantes que fallecieron en esas instalaciones impidieron los trabajos de demolición, argumentando que las autoridades se desharían de evidencia para deslindar responsabilidades. No obstante, Amieva refirió que en la carpeta de investigación se concluyó con todas las órdenes periciales y que no existe riesgo de destrucción de evidencia. “Queremos contar con la anuencia de todos los involucrados, esperamos tener reunión esta semana que se pueda tomar una decisión pronta”, comentó el funcionario luego de dar el banderazo de demolición para dos edificios en la colonia Paseos de Taxqueña, en la delegación Coyoacán./ EL HERALDO DE MÉXICO