Aprovechando la escasez de agua en la Alcaldía de Tlalpan, piperos particulares la extraen de un manantial en una zona de preservación ambiental del Ajusco.
- REFORMA constató cómo los operadores consiguen clientes por teléfono o por Whatsapp y cobran cada entrega desde mil hasta 3 mil pesos. El ojo de agua se encuentra a unos 15 kilómetros de Santo Tomás Ajusco, al final de un estrecho camino de terracería que se ha ido aplanando por el peso de los autotanques.
El caudal, que antes corría entre piedras, ahora se queda retenido en una especie de piscina hecha con plásticos gruesos. A decir de pobladores, la extracción inició esporádicamente a finales de 2018, pero desde febrero es diaria.
- «Es el único lugar donde todavía sale más agua, lo demás ya está seco y aquí esos vienen a sacar el agua que ni les cuesta y ¿en cuánto la venden? en miles y miles de pesos», reclamó un poblador entrevistado./REFORMA